Mariano Rajoy suele contar en sus actos con algunos empresarios 'fieles' a cualquier evento que haga. Pero este lunes no ha faltado ni uno: Juan Miguel Villar Mir (presidente de OHL), José Manuel Entrecanales (Acciona), Luis del Rivero (Sacyr), Enrique Cerezo (presidente de EGEDA, del Atlético de Madrid y productor de cine) son algunos de los empresarios que no han faltado a la presentación de la nueva biografía del líder del PP.
En el acto también han estado la baronesa Carmen Thyssen y directivos de medios de comunicación como Javier González Ferrari, presidente de Onda Cero, Maurizio Carlotti, vicepresidente de Antena 3.
Pero sobre todo ha sido la plana mayor del PP quien ha protagonizado los focos de los medios de comunicación: la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, la de Castilla La Mancha, Dolores de Cospedal, el presidente de la Generalitat Valenciana, Alberto Fabra, los acaldes de Madrid y Valencia, Alberto Ruiz-Gallardón y Rita Barberá y otras caras conocidas del Partido Popular: ni un solo presidente autonómico ha faltado a esta cita.
De la 'vieja guardia' del PP ha destacado la presencia de José María Aznar, que ha arropado a Rajoy en la presentación de su libro 'En confianza', una obra que recoge sus memorias personales y profesionales, según han informado a Europa Press fuentes de FAES.
La presentación, que tiene lugar en el Hotel Intercontinental de Madrid, es en un acto multitudinario, ya que han confirmado su asistencia una nutrida representación de dirigentes del PP y también personas vinculadas personalmente al líder popular.
El contenido de la biografía
En su libro, editado por Planeta, el presidente del PP se muestra dispuesto a implicar a CiU y a PNV en la gobernabilidad de España si gana las elecciones generales del 20 de noviembre, en línea con lo que ya hizo el Ejecutivo de José María Aznar en 1996.
"Buscábamos que tanto el nacionalismo vasco como el nacionalismo catalán, además de otras fuerzas como Coalición Canaria, se implicaran en la gobernabilidad de España --afirma--. Considero que ese espíritu sigue siendo válido para el próximo gobierno que el PP esté llamado a formar".
Rajoy confiesa que le pareció "muy positiva" esa mayor implicación den nacionalismo vasco en la gobernabilidad del Estado al inicio de la primera legislatura de Aznar. De hecho, recuerda que mostraron una "absoluta firmeza desde el primer momento en la lucha contra el terrorismo, convirtiéndola en una de las prioridades del Gobierno".
En cuanto a los posibles acuerdos con otras fuerzas políticas, destaca que el PP "puede hacer pactos con cualquier formación política" en la próxima legislatura. "Estos pactos serán públicos y fruto de un compromiso también público, cuyo cumplimiento será estrictamente supervisado a lo largo de la legislatura", advierte.
Regeneración democrática
Rajoy considera que no pueden permitirse que la política y los políticos ocupen el segundo o tercer lugar en el listado de problemas que preocupan a los españoles. "Debemos hacer un esfuerzo de regeneración democrática", añade.
Sobre la corrupción, cree que hay que ser "contundente" pero "respetando la presunción de inocencia", ya que mientras no se pruebe el hecho de sí, "no se puede ser inquisidor, condenar sin haber oído al acusado".
"Sé bien que ser juez no es tarea fácil. Así he intentado actuar en los casos en los que se ha acusado a algunos dirigentes del PP, que en muchas ocasiones no han resultado suficientemente probados", confiesa.
Rajoy afirma que es contrario a la legalización de partidos que,"cambiando las siglas, siguen sin condenar a ETA y sus métodos terroristas, y se constituyen en beneficiarios naturales de la amenaza de la banda terrorista, cuyos objetivos políticos comparten".
En el libro revela que le causó un "gran disgusto" la sentencia del Tribunal Constitucional que permitió a Bildu concurrir a las elecciones del 22 de mayo, así como que el PNV no aceptara el pacto que propusieron para "impedir" que Bildu gobernara en las instituciones. "Ver San Sebastián regida por un alcalde de Bildu me produjo un disgusto aún mayor", asevera.
El líder del PP cree que se "debe exigir la aplicación más rigurosa de la Ley de Partidos, que faculta para expulsar a Bildu de las instituciones en cuanto existan pruebas suficientes para demostrar que es un instrumento de ETA".
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