De manera accidentada, pero al fin y al cabo se ha completado la devolución de los 44 bienes del patrimonio histórico y artístico de Sijena al Monasterio de la localidad oscense. En realidad no han sido todas las obras, sino 43 de ellas, las que han llegado a la localidad aragonesa procedentes del Museo Nacional de Arte de Cataluña, en Lleida. Y es que tal y como informa Heraldo de Aragón citando a la consejera de Educación y Cultura del Gobierno de Aragón, Mayte Pérez, uno de los lienzos, del siglo XVIII, está extraviado y no ha vuelto al Monasterio.
La ausencia, que ha constando en el acta de la devolución, llevará al Gobierno aragonés a "pedir explicaciones" a Cataluña, ya que además hay otras obras que "están en un estado muy, muy, muy deteriorado", ha asegurado Pérez. "Incluso alguna será difícil de recuperar", se ha lamentado. En ese sentido, la consejera ha recordado que de los 53 bienes del primer envío, hace año y medio, llegaron 51. "Todavía estamos esperando que nos den explicaciones", ha recordado, según recoge el Heraldo.
No ha sido ese el único incidente del traslado, que inició de madrugada la Guardia Civil una vez cumplido el plazo dado por el juez para proceder al regreso de esta muestra del arte religioso de la comunidad aragonesa. Tal y como ha informado Heraldo, decenas de manifestantes cortaron la principal vía de acceso al museo, la rambla de Aragón, al grito de "El museo no se toca" y "Fuera fuerzas de ocupación". Los Mossos d'Escuadra tuvieron que intervenir para desalojar esta calle y se produjeron forcejeos entre los manifestantes y los agentes. El momento de mayor tensión se produjo cuando más de un centenar de personas intentaron acceder al perímetro vallado alrededor del Museo de Lleida, impidiendo el paso una barrera formada por decenas de Mossos.
Hacia las 9.00 llegaron otras cinco furgonetas de los antidisturbios de los Mossos, que se unieron a la decena de vehículos policiales y decenas de agentes que ya se encontraban en la zona desde la madrugada. Los agentes procedieron entonces a cortar parcialmente la Rambla de Aragón, junto al museo, e hicieron retroceder a alguno de los manifestantes que no querían moverse del lugar a golpe de porra. Los concentrados reaccionaron a la acción de los Mossos con gritos como "No hace falta pegar" o "España nos trata como a perros".
Despedida con agresiones
Durante toda la noche, alrededor de una docena de personas permanecieron en las inmediaciones del museo en protesta por el regreso de los bienes a Aragón, de donde salieron ilegalmente hace casi medio siglo, informa el Heraldo. Esta concentración fue creciendo hasta alcanzar en torno al centenar de personas, que portaban 'esteladas', bufandas y otras prendas amarillas en protesta por la encarcelación de los Jordis.
Finalmente, y cuando se cumplían quince horas y media desde que venciera el plazo dado por el juez, llegaron las obras al Monasterio de Sijena. A eso de las 15.30, el camión cargado con las piezas llegó a la localidad oscense, donde esperaban Mayte Pérez y el director general de Cultura, Ignacio Escuín. Allí, unas treinta personas recibieron entre vítores y aplausos a los técnicos del Gobierno regional, según relata Heraldo. El embalaje de las piezas se terminó a media mañana, y en su despedida de Lleida más de 200 personas se concentraron a las puertas del museo para protestar a voces contra la Guardia Civil y los Mossos d'Esquadra. Entre los gritos se escucharon insultos, e incluso fueron lanzadas tres piedras contra el camión encargado del traslado, sin llegar a causar daños.
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