Los partidos que ahora defienden la independencia de Cataluña (CDC, ERC y la CUP), añadiendo también a Solidaritat Catalana per la Independència (la coalición SI, que no se presenta a las elecciones del 27 de septiembre), sumaron cerca del 50 por ciento de los votos en los dos últimos comicios autonómicos, los de 2010 y 2012, en los que aumentó la participación respecto a los comicios de 2006.
En las elecciones de 2012, CiU obtuvo el 30,7%, ERC, el 13,7%, la CUP, el 3,5%, y SI, el 1,3%, de manera que entre todos sumaron el 49,2%. Ese año se alcanzó un récord de participación en unas autonómicas catalanas, al llegar al 67,7%.
En 2010, el porcentaje total fue similar al de dos años antes, el 48,8%: CiU consiguió el 38,5%, ERC, el 7%, y SI, el 3,3% (la CUP no se presentó). La gran diferencia respecto a 2012 fue la participación, con casi nueve puntos porcentuales menos (58,8%).
De cara al 27S hay que tener en cuenta una serie de cambios importantes respecto a las anteriores citas electorales en Cataluña. Esta vez, la coalición SI no concurre a las elecciones, y CiU se ha dividido en CDC y UDC, aunque el porcentaje de votos que puede recibir esta última formación --contraria al plan de ERC y CDC para lograr la independencia-- es residual, según las encuestas.
En cuanto a la lista independentista Junts pel Sí, incluye a otros dos partidos aparte de CDC y ERC, que son Demòcrates de Catalunya y Moviment d'Esquerres, pero ambos son de reciente creación y nunca han participado en unas elecciones autonómicas, de manera que se desconoce el apoyo que podrían recabar en las urnas.Horas bajas de CIU y ERC
Los partidos que ahora apuestan por que los catalanes tengan un Estado propio vivieron sus horas más bajas entre 1999 y 2006, el periodo en el que más lejos quedaron de conseguir el respaldo de la mitad de los votantes.
En aquel entonces, solo estaban CiU y ERC, que sumaban entre el 45 y el 47% de los votos. En cuanto a la participación, se hundió en 2006 (56%), después de haber alcanzado el 62,5% en 2003 y el 59,2% en 1999.
En las autonómicas de 2010 y 2012, esos dos partidos continuaron en ese nivel, bajando incluso al 44,4% en las últimas. Sin embargo, si se añaden las papeletas de la CUP y de SI, se observa que el voto total de las formaciones que ahora quieren la independencia vuelve a acercarse al 50%.
Desde el comienzo de la etapa democrática, los votos recibidos por CiU y ERC han superado esa barrera del 50% en tres ocasiones: en 1992 (54,1%), en 1984 (51,2%) y en 1995 (50,4%). En el 84 y el 95, la participación superó el 60%, pero en 1992 fue la más baja que se ha registrado en unas elecciones autonómicas celebradas en Cataluña, el 55%.
PP+PSC solo superaron una vez a CIU+ERC
Mientras, las formaciones que tradicionalmente han rechazado la independencia de Cataluña, el PP y el PSC, lograron su mejor resultado conjunto en 1999, sumando un 47,5% y superando a CiU más ERC (46,4%). También consiguieron un respaldo considerable en 2003, un 43,1%, aunque en esta ocasión se quedaron a más de cuatro puntos porcentuales de los otros dos partidos.
En la mayoría de los comicios autonómicos celebrados en Cataluña, PP y PSC han oscilado entre el 30 y el 38%, pero en 2012 cayeron al 27,4% como consecuencia de la progresiva y constante pérdida de apoyo de los socialistas desde 1999.
Mientras, otro actor político a favor de la unidad de España, Ciudadanos, ha ido ganando peso en Cataluña, pasando de un 3% en las autonómicas de 2006 a un 7,6% en 2012. Con sus votos unidos a los de PP y PSC, las formaciones constitucionalistas reunieron en los dos últimos comicios regionales un 35% (2012) y un 34% (2010).
Otro factor nuevo de cara al 27S es la candidatura de Catalunya Sí que es Pot, que integra a ICV, EUiA, Podemos y Equo, partidarios del 'derecho a decidir' pero ejerciéndolo de forma legal. El que más recorrido tiene en Cataluña es ICV-EUiA, que hace tres años recibió el 9,9% de los votos, subiendo más de dos puntos respecto a 2010 y recuperando el nivel de 2006.
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