Los policías apuñalados mejoran mientras el agresor prestará declaración hoy

Madrid, 15 sep.- Los tres policías que ayer fueron apuñalados en Madrid por un hombre nigeriano de gran corpulencia, que también les disparó tras arrebatarles el arma reglamentaria, se recuperan poco a poco, al igual que el agresor, al que se ha reimplantado un dedo que perdió durante el forcejeo con los agentes.

Según han informado fuentes de la Jefatura Superior de Policía de Madrid, los tres policías nacionales que fueron atacados ayer por Nwigwe U.C., nigeriano de 35 años, en un parque del distrito de Ciudad Lineal de Madrid, evolucionan bien, aunque permanecen ingresados.

El que resultó herido más grave, un agente de 22 años que presentaba heridas de arma blanca en la cabeza, el hombro izquierdo y la escápula derecha, tuvo que ser operado ayer y se recupera en la UCI del hospital Gregorio Marañón, sin que se tema por su vida.

Por su parte, el supuesto agresor se ha recuperado tras la operación a la que tuvo que ser sometido para reimplantarle un dedo que se había amputado durante el forcejeo con los policías, y se prevé que esta tarde sea trasladado desde el mismo hospital a Comisaría para tomarle declaración.

Se trata de un hombre de casi dos metros de altura y más de cien kilos de peso que está acusado de apuñalar a un agente, arrebatar el arma reglamentaria a su compañera y de apuñalar a otros dos policías que acudieron a la zona, a uno de los cuales arrebató también el arma, con la que efectuó varios disparos.

Uno de estos disparos alcanzó a un agente, quien no sufrió daños de consideración al impactar la bala contra el chaleco antibalas que vestía.

El agresor fue reducido y arrestado con la ayuda de otra patrulla que también acudió a la zona alertada por los primeros agentes atacados.

Al identificarle se comprobó que tiene antecedentes por atentado contra agente de la autoridad y por infringir la Ley de Extranjería.