Los talibanes paquistaníes vuelven a quedarse sin líder por segunda vez en seis meses

  • Islamabad.- Tras la muerte hace apenas medio año del líder de los talibanes paquistaníes Baitulá Mehsud, portavoces insurgentes y los principales servicios de inteligencia (ISI) dieron hoy por muerto también a su sustituto, Hakimulá Mehsud, que fue atacado en enero por un avión espía de Estados Unidos.

Confirman la muerte del líder de los talibanes paquistaníes, Hakimulá Mehsud
Confirman la muerte del líder de los talibanes paquistaníes, Hakimulá Mehsud

Islamabad.- Tras la muerte hace apenas medio año del líder de los talibanes paquistaníes Baitulá Mehsud, portavoces insurgentes y los principales servicios de inteligencia (ISI) dieron hoy por muerto también a su sustituto, Hakimulá Mehsud, que fue atacado en enero por un avión espía de Estados Unidos.

"Nuestras informaciones nos confirman la muerte de Hakimulá. Esto supone un duro golpe para Tehrik-e-Taliban Pakistán (TTP), va a afectar mucho a sus operaciones", aseguró a Efe una fuente del ISI.

La fuente precisó que el cabecilla falleció a consecuencia de las heridas de gravedad sufridas en un ataque con misiles de un avión no tripulado de EEUU ocurrido el pasado 14 de enero en la localidad de Shaktoi, situada en la demarcación tribal de Waziristán del Sur, pero evitó ofrecer más detalles sobre su muerte.

En declaraciones a diversos medios paquistaníes, portavoces talibanes de la región tribal de Orakzai, a la que supuestamente fue trasladado días atrás Mehsud para recibir tratamiento médico, confirmaron la muerte de su líder.

Estas fuentes añadieron que el cabecilla Nur Jamal -un clérigo con base en Orakzai- ha sido nombrado sucesor temporal de Mehsud al frente del movimiento talibán (TTP) durante la fase transitoria que se inicia ahora.

De acuerdo con esta versión, Mehsud falleció finalmente la noche del pasado domingo muy lejos de su feudo (las áreas tribales fronterizas con Afganistán), cerca de la localidad oriental de Multán, donde supuestamente se encontraba de camino hacia la meridional Karachi para ser atendido por buenos médicos.

El mando central del TTP no se ha pronunciado por el momento y otros portavoces insurgentes han desmentido este fallecimiento, algo que ya hicieron con Baitulá Mehsud en agosto de 2009.

El portavoz del Ejército paquistaní, Athar Abbas, evitó "entrar en especulaciones" y mantuvo una postura cauta al respecto.

"No tenemos verificación final de la muerte de Hakimulá Mehsud, así que no podemos confirmar ni desmentir este extremo", se limitó a decir a Efe.

"No hay manera independiente de confirmarlo al cien por cien. Algunas fuentes talibanes desmienten la muerte de Mehsud, pero da la impresión de que realmente ha fallecido y de que la cúpula insurgente no quiere admitirlo hasta que haya un sucesor claro al frente", expuso a Efe Mubarak Alí, un periodista procedente de una región tribal paquistaní.

Otro periodista con contactos dentro del movimiento talibán restó credibilidad a que el clérigo Nur Jamal, un cabecilla poco destacado que ha suscitado atención mediática en los últimos días, vaya a convertirse en el líder 'de facto' del TTP, y expuso que "se trata de una disputa interna local" de los integristas de Orakzai.

En su opinión, los candidatos mejor posicionados para suceder a Mehsud son Waliur Rehman, jefe de los talibanes en Waziristán del Sur, considerado el feudo máximo de los integristas y donde el Ejército lleva a cabo actualmente una operación, y Qari Husain, un alto mando conocido por ser instructor de terroristas suicidas.

El joven Hakimulá Mehsud, de unos 28 ó 29 años, se había hecho con el liderazgo del TTP a finales de agosto tras fallecer su predecesor, Baitulá Mehsud, también en un ataque de EEUU.

En aquella ocasión, los talibanes tardaron varias semanas en admitir la muerte de Baitulá, hecho que abrió una disputada transición de poder en la cúpula del movimiento insurgente.

En apenas seis meses, Hakimulá ha orquestado una de las peores olas de violencia terrorista que ha sufrido Pakistán en los últimos años; sólo desde octubre cerca de 900 personas, la mayoría civiles, han perdido la vida en más de medio centenar de atentados.

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