Mañana martes a las 14.00 horas finaliza el plazo dado por la líder de Vox en la Comunidad de Madrid, Rocío Monasterio, para llegar a un acuerdo con PP y Cs que permita la investidura de la popular Isabel Díaz Ayuso.
"Avanzamos en paralelo con ambos partidos pero mañana (por hoy) habrá que darle un empujón muy serio si queremos llegar al acuerdo antes de la ronda de contactos para la investidura", dicen a La Información fuentes cercanas al equipo negociador de Génova.
Tras el órdago de Monasterio y sus ‘condiciones’ de obligado cumplimiento para convertir a Ayuso en presidenta, el camino no parece que vaya a ser sencillo. De hecho, en las tres formaciones dan prácticamente por hecho que no habrá acuerdo y que deberán de verse las caras de nuevo en septiembre, después de un verano de conversaciones para acercar posiciones.
Monasterio exige un pacto a tres -PP, Cs y Vox- que los de Albert Rivera, representados por Ignacio Aguado, no parecen muy dispuestos a suscribir. Por contra, Díaz Ayuso ha intentado templar gaitas en el duelo político regional aceptando hablar con Vox sobre posibles modificaciones en materias claves para los de Santiago Abascal, como es el caso de la Educación, las subvenciones a organizaciones no gubernamentales y normativas LGTBI.
A lo largo del domingo representantes políticos del PP han coincidido en algunos actos públicos con sus 'socios de investidura', aunque no para negociar.
Fuentes populares aseguran a este periódico que sobre las mesas de Cs y Vox hay propuestas desde hace días para hablar y que el objetivo es pisar hoy el acelerador de las negociaciones aunque no habría, según las mismas fuentes, fijadas reuniones concretas para desbloquear la investidura de Ayuso.
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