La madre del bebé golpeado en Elche : "Cada uno tiene su forma de educar"

La madre del niño de 2 años que falleció el pasado septiembre a causa de las lesiones que presuntamente le causó su padrastro, quien le habría golpeado la cabeza, ha defendido al presunto asesino asegurando que "cada uno tiene su forma de educar". El menor murió tras permanecer ingresado en la UCI del Hospital General de Alicante y su madre y la pareja de esta fueron detenidos por presunto maltrato al pequeño en el ámbito familiar. 

El sumario del caso, que publica El Periódico, recoge las declaraciones de los jóvenes, de entre 25 y 27 años, después de ser detenidos en el hospital tras llevar al pequeño "inconsciente y con múltiples contusiones en cuerpo y cara". "Le di tres o cuatro golpes en la cabeza. Justo después entró la madre a la habitación", explicó José Antonio Pérez, pareja de la madre del pequeño. Además, justificó su comportamiento con el menor, reconoció que no era la primera vez que le pegaba, porque "Cristina dice que ella no sabe educar al niño, delega en mí y mi forma de educar es dando cachetes".

Cristina Jiménez, la progenitora, quitó importancia a los hechos asegurando que el niño es "muy trasto y se cae mucho". Además, trató de justificar a su pareja asegurando que "cada uno tiene su forma de educar" y defendió que "le quiere mucho (al niño), creo que lo que pasó es que ese día a Jose se le fue la mano".

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Las declaraciones de ambos no fueron las primeras que dieron a la policía. Cuando fueron detenidos dieron hasta tres versiones diferentes con las que buscaron justificar las lesiones. En un principio aseguraron que el menor se cayó en la bañera, después explicaron que había sido secuestrado por unos encapuchados y, por último, justificaron que otros niños habían agredido al pequeño. 

La investigación de las autoridades, como recoge el mismo medio, concluye que el niño murió por "estrangulamiento" y también se hace eco de declaraciones de algunos vecinos del edificio en el que vivían que aseguraron que "el niño lloraba todos los días, pero no era un llanto normal, era un llanto de dolor".