Madrid. La oposición critica en bloque que el debate sobre el estado de la ciudad vuelva a ser un viernes


Los portavoces de los grupos municipales del PSOE, IU y UPyD en el Ayuntamiento de Madrid coincidieron hoy en criticar que el Debate sobre el Estado de la Ciudad vaya a volver a celebrarse por tercera vez consecutiva un viernes, en concreto este 27 de junio, día de escasa atención mediática, y que el procedimiento no se haya modificado para hacerlo más cercano a un debate parlamentario.
Desde el PSOE, Jaime Lissavetzky recordó que el anterior alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, prometió parlamentarizar el Ayuntamiento, y protestó que no ha terminado de hacerse nunca. En su opinión, porque a la regidora actual, Ana Botella, “le da miedo el debate”, de forma que éste será “virtual” y “disminuido” y más próximo a una “suma de monólogos” cuando “esto no es ‘El club de la comedia’". También retó a Botella a contestar por una vez a los grupos por separado, en lugar de a todos en bloque.
En este Debate sobre el Estado de la Ciudad, el tercero y último de Botella en esta legislatura, Lissavetzky denunciará que en Madrid se vive “una situación de atonía”, con un gobierno municipal “desnortado” y “al albur de los vientos”, que sin Juegos Olímpicos no sabe a qué otra apuesta aferrarse. También auguró que la gestión de Botella quedará siempre marcada por el Madrid Arena y por el citado fracaso olímpico.
El portavoz de IU, Ángel Pérez, señaló que Botella se toma los debates sobre el estado de la ciudad como “el comienzo de un fin de semana largo”, porque con el actual reglamento no se aprueba nada, sino que se pronuncian “cuatro discursos y a casa”.
Finalmente, el de UPyD, David Ortega, incidió en la escasa cobertura mediática de los viernes y en que la regulación del debate no se ha modificado “por una decisión unilateral del PP”, poco proclive al intercambio parlamentario tras “dos décadas de mayoría absoluta”.
Este portavoz concluyó que, de la etapa de Botella, queda que “se paga más por menos”, al subir los impuestos y perder calidad los servicios municipales. También deploró los 1.300 millones de euros perdidos en “inversiones inútiles” y edificios no utilizados y los 100 que le han costado al Ayuntamiento los juicios perdidos por demandas.
“Vamos a ser muy críticos”, advirtió de cara al debate, donde recriminará “la falta de seriedad, responsabilidad, rigor y creibilidad” de un equipo de Gobierno que lo apostó todo a Eurovegas y los Juegos Olímpicos.

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