Madrid. Otros 41 millones para la renta mínima de inserción


El Consejo de Gobierno aprobó hoy un gasto de 40.959.908 euros para abonar a las familias desfavorecidas que reciben la Renta Mínima de Inserción (RMI), explicó su portavoz, Salvador Victoria, quien destacó que esta cantidad es la segunda aportación que realiza el Gobierno regional para ayudar a esas familias durante 21013.

Dijo que en total, se destinarán 82 millones de euros y que estas familias, que carecen de recursos económicos, tendrán garantizada la prestación con el pago de las nóminas de julio a diciembre.
“El Gobierno regional se compromete a abonar la RMI a las familias más vulnerables y desfavorecidas que realmente necesiten esta prestación en 2013”, dijo Victoria, quien indicó que “Madrid es una de las pocas comunidades autónomas que garantizan la percepción de manera indefinida a las familias que acrediten los requisitos establecidos”.
Informó de que los créditos destinados a la RMI crecen un 56% respecto a 2012, hasta alcanzar más de 82 millones de euros, y señaló que se espera se beneficien unas 19.000 familias en 2013. Actualmente 17.200 familias perciben esta renta en la región.
Asimismo, dijo que la Comunidad de Madrid dio de baja en seis meses (desde noviembre de 2012 a abril de 2013) un total de 2.765 prestaciones de la Renta Mínima de Inserción (RMI) por detectar irregularidades.
Señaló que las nuevas medidas aplicadas por el Gobierno regional, tras la modificación de la Ley de la RMI, han permitido un mayor control en el seguimiento de la prestación económica.
“Todas estas medidas sirven para actuar ante cualquier irregularidad", dijo Victoria, quien explicó que “la actual situación de crisis económica y de desempleo ha motivado el incremento de familias preceptoras de la RMI, por lo que hay que reforzar los mecanismos de seguimiento y control para garantizar que la prestación sea percibida sólo por aquellas familias que mantienen los requisitos legalmente establecidos”.
Explicó que la Consejería de Asuntos Sociales detectó irregularidades al requerir la comparecencia personal del perceptor de la RMI, sobre todo de aquellas unidades familiares que no residan de manera efectiva en la región.
A su juicio, “otra modificación que ha permitido un mayor control en el seguimiento de la prestación ha sido incorporar la obligación de que los titulares de la RMI busquen activamente un empleo, no rechacen injustificadamente una oferta de empleo o causen baja voluntaria en su trabajo”.
Como requisito fundamental es que los perceptores de la RMI tendrán que tener escolarizados a los menores en edad y suscribir el compromiso de formalizar el preceptivo programa individual de inserción.
También se introduce la posibilidad de suspensión temporal de la prestación por incumplimiento de obligaciones y compromisos, así como por incumplimiento reiterado de las mismos.
Asimismo, señaló, que a lo largo de 2012 se reclamaron más de 1,1 millones de euros a aquellos titulares que percibieron de manera indebida la prestación o por compatibilizarla con otros ingresos que no fueron declarados.
La RMI se concede a toda persona que se encuentra sin ingresos para satisfacer las necesidades básicas de la vida diaria durante el tiempo que sea necesario y siempre que se cumplan los requisitos establecidos en la Ley de RMI de la Comunidad, como: carecer de ingresos económicos, tener un patrimonio inferior a los 22.533 euros en el caso de una persona sola (la vivienda habitual no se computa), contar con residencia legal en la Comunidad de Madrid y estar empadronado en algún municipio de la región con una antigüedad de 12 meses.
La cuantía de la RMI se establece en función del número de miembros de la unidad familiar, abarcando desde 375,55 euros para una sola persona, hasta un tope de 532,51 euros para familias de tres o más miembros.
Desde que la Comunidad de Madrid creó este recurso, han percibido esta prestación más de 37.500 familias.

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