Maneiro (UPyD) pide que la Guardia Civil "se quede" en Euskadi

Vitoria, 12 oct.- El candidato a lehendakari por UPyD, Gorka Maneiro, ha entonado hoy un "que se quede" la Guardia Civil en Euskadi, en contraposición al famoso lema "que se vayan" que se hizo famoso en la década de 1980 y 1990, especialmente.

Maneiro y otros candidatos de UPyD a las elecciones del próximo día 21 han celebrado hoy un acto frente al cuartel de la Guardia Civil de la localidad alavesa de Llodio, donde ha leído un manifiesto que después han entregado a los mandos del Instituto armado.

Ha explicado que quería sumarse a la fiesta de la patrona de la Guardia Civil como "homenaje a todos los guardias que han sido escudos para los ciudadanos vascos y españoles asediados por la vileza del terror, el asesinato, la extorsión y la persecución implacable de todos los que no quisieron someterse a sus dictados".

Maneiro ha recalcado que hacían este acto "públicamente y a la luz del día, para borrar o mitigar aquellas viejas imágenes en blanco y negro cuando guardias civiles asesinados eran trasladados clandestinamente a sus pueblos y ciudades de origen para ser enterrados en la soledad y el dolor de sus seres queridos, como si fueran apestados, con el silencio o la indiferencia cómplice de muchos y el grito hostil de los asesinos y sus secuaces".

Ha insistido en que desde UPyD querían "entonar alto y fuerte 'que se queden', y por muchos años, porque aún se les necesita para derrotar en todos los frentes a los que les asesinaron y persiguieron con saña, y que, sin haber pedido perdón por sus crímenes, hoy se presentan cínicamente como los adalides de la libertad".

A juicio de Maneiro, es un "sarcasmo que los que hasta ayer ejercían y reivindicaban el programa del terror pasen a las instituciones sin haber transitado por una cuarentena democrática".

Ha adelantado que trabajará para que el reconocimiento de la sociedad vasca al trabajo de la Guardia Civil en la lucha contra el terrorismo "tenga la expresión que se debe", en forma de un Monumento a la Guardia Civil, "como símbolo de la libertad de Euskadi, junto al monumento de las víctimas a las que dedicaron su vida".