Marina Silva cree que las protestas pueden cambiar el rumbo de Brasil

  • La ambientalista brasileña y excandidata presidencial Marina Silva calificó hoy las protestas sociales como un "movimiento de belleza y grandeza" que tiene "potencial para cambiar" al país, en una intervención en el segundo foro "Efe Cafe da manhã".

Sao Paulo, 11 jul.- La ambientalista brasileña y excandidata presidencial Marina Silva calificó hoy las protestas sociales como un "movimiento de belleza y grandeza" que tiene "potencial para cambiar" al país, en una intervención en el segundo foro "Efe Cafe da manhã".

Silva, que en las elecciones presidenciales de 2010 quedó en tercer lugar con casi el 20 % de los votos, consideró que el "despertar" del país "era una cuestión de tiempo".

La también exministra de Medio Ambiente recordó que hace pocos años advirtió que la "insatisfacción" de la población "iba a transbordar de lo virtual a lo presencial" en cualquier momento.

"Lidiar con lo imprevisible es parte de la condición humana y las protestas estaban latentes y la explosión de voces, de banderas, de propuestas, evidencia que no hay satisfacción con la forma de representación política", subrayó.

Para la exsenadora "la política no es una repetición, es un acto singular en cada momento" y en tal sentido mencionó que ella alguna vez fue catalogada por un medio de comunicación como alguien que estaba en el "ostracismo" por haber alertado sobre la insatisfacción popular.

"Estoy en el ostracismo para el actual modelo político y las manifestaciones en las calles no son peligrosas, pues el 99 % son de personas que están ahí pacíficamente, presentando banderas obvias: salud, educación, seguridad y movilidad".

Las protestas comenzaron en Sao Paulo el 10 de junio pasado, en principio por el alza de la tarifa del transporte urbano y luego se extendieron por todo Brasil con una amplia serie de reivindicaciones y con movilizaciones, algunas de las cuales terminaron con actos de vandalismo y represión policial.

"Lo mejor de esa nueva situación es el hecho de que las personas están asumiendo ese papel de activismo", apuntó Silva, quien diferenció los movimientos populares brasileños con los que afrontan los países árabes y europeos.

"Nadie estaba cuestionando la legitimidad de los que fueron elegidos democráticamente para gobernar y eso aparta cualquier posibilidad de autoritarismo en estas marchas", aseveró.

Para Silva, la política "es un acto de servicio, lo que debe cambiar es la agenda, independiente de quién esté en el Gobierno".

Agregó que la oleada de protestas pasó por diferentes momentos y fases: "Primero trataron de minimizarla, después de disminuirla, luego de dirigirla y, finalmente, por parte de un cierto sector, de descalificarla", resaltó.

En su exposición durante el ciclo de debates económicos, sociales y políticos organizado por la Agencia Efe, con el apoyo del Instituto Cervantes de Sao Paulo y el patrocinio del Banco Santander Brasil, Silva reafirmó que es contraria a la reelección y defendió un mandato único de cinco años.

"Si no hubiese reelección la presidenta Dilma (Rousseff) estaría más involucrada con estos movimientos sociales", manifestó.

Al ser cuestionada por sus cambios de filiación política, la historiadora y pedagoga justificó: "salir (de un partido) no es un defecto, puede ser una virtud".

"Salí del PT (Partido de los Trabajadores) y del PV (Partido Verde) por cuestiones de principios y propuestas, y fui convencida a crear un nuevo partido: la Rede Sustentabilidade (Rede)", puntualizó Silva, que se definió como una "sustentabilista progresista" y no una política de derecha o izquierda.

El partido consiguió en el tiempo récord de tres meses y medio la recolección de las 500.000 firmas para su reconocimiento y en la actualidad cuenta con 750.000 apoyos.

Mostrar comentarios