Mas elude un cara a cara con Montilla en un agrio debate en el último pleno

Barcelona.- El líder de CiU, Artur Mas, ha eludido mantener un cara a cara con el presidente catalán, José Montilla, en la última sesión de control de esta legislatura en el Parlament, en un debate agrio sobre todo con PPC y Ciutadans, que han tildado hoy al Govern de "decadente" y de "dar alas al independentismo".

En un clima electoral, puesto que sólo quedan dos meses para las elecciones catalanas, había expectación en la cámara por ver qué intensidad podía tener un debate entre Montilla y Mas en el último pleno de la legislatura.

Mas, cuya formación ha reclamado en más de una ocasión un cara a cara televisivo con Montilla, ha renunciado a intervenir en el último pleno en favor del portavoz parlamentario, Oriol Pujol, que ha centrado sus críticas en lo que considera falta de opinión del presidente sobre la reforma laboral, a una semana de la huelga general.

En una conversación informal con periodistas, Mas ha aclarado posteriormente que su decisión de no intervenir en el pleno se ha debido a que quería evitar acabar la legislatura "con bronca" por el espinoso tema de la reforma laboral.

Una bronca que sí que ha protagonizado el debate entre Montilla y los portavoces parlamentarios del PPC y Ciutadans, a cuenta del balance del mandato.

La portavoz parlamentaria del PPC, Dolors Montserrat, ha criticado la "pobreza de palabras" del presidente catalán y lo ha acusado de "dar alas al independentismo" en sus cuatro años de mandato con ERC y tras encabezar "el peor Govern de la historia de Cataluña".

Montserrat cree que Montilla "reniega de las políticas que ha impulsado" y "no se lo cree nadie" después de pedir, en la Fiesta de la Rosa del PSC, que no quiere "más lío" en Cataluña.

"Usted tiene que rendir cuentas por lo hecho y no por sus palabras. Ya no se lo puede creer nadie. Se presenta como garante de la convivencia entre Cataluña cuando es usted quien ha dado alas al independentismo, haciendo leyes identitarias en vez resolver los problemas de los catalanes", ha aseverado.

En su replica, Montilla ha cargado duramente contra el PP y ha señalado que son los populares los que contribuyen al "lío" en España con su recurso al Estatut, "con la ofensiva contra nuestra lengua y utilizando la inmigración de forma chapucera y miserable", en alusión a la visita de dirigentes del PP a barrios de Badalona con colectivos de gitanos de origen rumano.

"Les importa bien poco, tratando de romper la convivencia, y no han salido con la suya porque la sociedad catalana es una sociedad madura y estoy convencido de que situará a cada uno en su sitio", ha subrayado Montilla, recordando así la cita electoral del 28-N.

Montilla ha ido más lejos y ha tildado de "xenófobo, españolista y centralista" el discurso del PPC, un partido que ve con "poco margen para hacer un discurso propio" ante la central de la calle Génova de Madrid.

Por su parte, el presidente de Ciutadans, Albert Rivera, se ha dirigido a Montilla como "el presidente de la decadencia, de las prohibiciones y de las imposiciones", por aprobar leyes como la de las consultas populares, apoyar las multas a comercios por no rotular en catalán o "encabezar manifestaciones en contra de las instituciones del Estado", en alusión a la protesta en contra de la sentencia del Tribunal Constitucional del pasado 10 de julio.

"Un 19% de paro, más de 600.000 personas que no tienen empleo, una Cataluña con la peor imagen de la historia de la democracia. Ésta es la decadencia: los números que usted nos ha dejado", ha argumentado Albert Rivera, que ha añadido: "Usted se ha dedicado a llevar a cabo políticas identitarias y no políticas sociales como esperaban los ciudadanos que le han votado".

Montilla ha replicado a Rivera que "en cuanto a romper la convivencia, mírese al espejo y ahí encontrará la respuesta".

"Me alegro de haber coincidido muy pocas veces con usted esta legislatura porque usted sí representa la decadencia y la crispación, representa la regresión, la confrontación, tratar de aprovecharse de las bajas pasiones", ha espetado Montilla a Rivera, al que ha señalado como el culpable de la desintegración de Ciutadans durante este mandato, dos de cuyos tres diputados abandonaron el partido.