Barcelona, 4 jul.- El presidente de la Generalitat, Artur Mas, ha expresado hoy en el Parlament sus temores ante una hipotética modificación legislativa por parte del Gobierno que "cuele" a los catalanes la lengua castellana como vehicular en las escuelas y pretenda acabar con la inmersión lingüística.
Sin embargo, Mas se ha mostrado tranquilo ante la sentencia del Tribunal Supremo (TS) que la semana pasada impuso también el castellano como lengua vehicular en el segundo ciclo de educación infantil en Cataluña, junto con el catalán.
"La Ley Catalana de Educación (LEC) está por encima de esta resolución y, por tanto, esta no se podrá cumplir", ha valorado ante la inquietud de ERC y el PPC que, con distinta voluntad, le han preguntado al presidente catalán las intenciones de la Generalitat en materia de inmersión lingüística tras esta sentencia del TS.
Mas ha recordado que la LEC "no está impugnada" en los apartados que tratan de la lengua que debe usarse en las aulas, por lo que ha pedido a los republicanos que "no creen intranquilidad donde no la hay" y "no hurguen en una herida que no existe".
En definitiva, el presidente catalán ha garantizado que el próximo curso escolar "no se tocará nada de lo presente" y ha recriminado a la presidenta de los populares catalanes, Alícia Sánchez-Camacho, que en Cataluña "no hay más problemas con el castellano que los que se inventa el PP".
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