Mauritania desvincula la extradición al preso maliense de la cesión de un avión español

Nuakchot.- El ministro mauritano de Defensa, Hamadi Uld Hamadi, dijo hoy que la cesión del Gobierno español de un avión de vigilancia marítima a su país no está relacionada con la extradición a Mali del maliense Omar Saharaui, autor del secuestro de tres cooperantes españoles el pasado noviembre en Mauritania.

"Las negociaciones con Madrid relativas a ese avión comenzaron en 2005, es decir, mucho antes del secuestro de los tres cooperantes", afirmó Uld Hamadi durante una rueda de prensa en Nuakchot.

El ministro mauritano desmintió así informaciones recientemente publicadas por la prensa argelina y española en las que se indicaba que la aeronave constituía una "primera remuneración" a Mauritania por la extradición de Saharui a Mali, como preludio a la liberación de los rehenes.

El avión, cuya cesión fue autorizada por España el pasado 3 de septiembre por un precio simbólico de cien euros, "está destinado a la lucha contra la inmigración ilegal y no tiene relación con la guerra antiterrorista", sostuvo Uld Hamadi.

Precisó además que el acuerdo sobre dicho aparato se firmó en octubre de 2007 y que su tripulación fue instruida por España en 2008, "fechas anteriores al secuestro de los tres españoles, el 29 de noviembre de 2009".

El Gobierno español ya había informado a principios de este mes de que la cesión es consecuencia de los convenios en materia de lucha contra la inmigración ilegal y se produce en el marco del Acuerdo Técnico firmado entre los Ministerios de Defensa de España y Mauritania.

El maliense Omar Uld Sid'Ahmed Uld Hame, verdadero nombre de Omar Saharaui y condenado a 12 años de prisión firme por su participación en el secuestro de los españoles, fue extraditado el pasado 16 de agosto "conforme al convenio de extradición entre Mali y Mauritania", señaló en esa fecha la agencia oficial mauritana de información, AMI.

Los cooperantes Roque Pascual y Albert Vilalta fueron liberados el 22 de agosto tras casi nueve meses de secuestro en manos de Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI), mientras que Alicia Gámez, también retenida con ellos cuando viajaban en una caravana humanitaria, había sido puesta en libertad en marzo.