Pontevedra.- Más de medio millar de vecinos de la mujer Sonia Iglesias Eirin, de 37 años, desaparecida hace más de una semana en Pontevedra, participaron hoy voluntariamente en las tareas de rastreo de una zona en búsqueda de indicios que puedan conducir a localizar rastro.
Los participantes acudieron a la convocatoria ante el pazo da Cultura del Ayuntamiento para recibir instrucciones de las autoridades y responsables de la investigación con el objetivo se sumar esfuerzos en la búsqueda que ha generado angustia entre los familiares y vecinos de la mujer, desaparecida misteriosamente el miércoles de la semana pasada.
El operativo de búsqueda se centro en tres grandes áreas: A Xunqueira do Alba, montes del ayuntamiento de Poio y la zona recreativa de Cotorredondo que comparte los municipios de Vilaboa y Marín.
Estas zonas ya fueron rastreadas en los últimos días por equipos encargados de investigar la desaparición de la mujer el pasado 18 de agosto, después de que varios testigos afirmaran haberla visto por distinto puntos del centro de Pontevedra.
Las labores de coordinación de la búsqueda fuero efectuada por 70 agentes de la Policía Nacional, a los que se sumaron refuerzos de la Policía Autonómica y de voluntarios de Protección Civil.
Fuentes de la investigación indicaron a Efe que en las tareas de búsqueda no se hallaron indicios significativos sobre la mujer, casa y madre de un hijo de 8 años.
La operación de rastreo tiene previsto concluir hacia las 14:00 horas y posteriormente las unidades encargada de la investigación continuarán las labores para buscar pistas sobre su paradero.
El jefe de la brigada de Seguridad Ciudadana de la Policía Nacional, Evaristo Pérez, advirtió a los participantes que cualquier detalle puede ser importante para lograr algún indicio que permite localizar el paradero.
El Juzgado encargado de la investigación ha autorizado ya la orden para revisar el teléfono móvil que, al igual que una cartera con su documentación, fueron hallados por transeúntes en distintos puntos de la ciudad días después de su desaparición, precisaron las fuentes.
Agregaron que los investigadores prevén analizar especialmente los últimos números registrados en el teléfono antes de que su desaparición.
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