Mesa del Congreso: cómo se eligen sus integrantes y por qué Vox es la incógnita

Congreso de los Diputados
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Europa Press

Este martes, 3 de diciembre, arranca la XIV Legislatura tras las pasadas elecciones del 10 de noviembre. Los colores de las sillas del Congreso serán esta vez muy diferentes, con Ciudadanos como principal damnificado -pasa de 56 escaños a 10- y Vox aún más fuerte -de 24 a 52 diputados-.  

Aunque, eso sí, lo que copa ahora todos los focos es la Mesa del Congreso, el órgano de Gobierno de la Cámara Baja. Se trata, pues, del primer gran escollo de la Legislatura y en la que los partidos se verán obligados a ponerse de acuerdo. 

Dicho de un modo sencillo, la Mesa del Congreso, dirige el día a día de la Cámara baja. Es decir, organiza el trabajo, fija el calendario de actividades, toma decisiones con respecto a su régimen interior, elabora el Presupuesto del Congreso y controla su ejecución y dice si admitir o no los escritos de los diputados y grupos según las normas del Reglamento, que también regula sus funciones. 

Cómo se eligen sus integrantes

Según el reglamento, la Mesa del Congreso es un órgano colegiado, pero no qué fuerzas políticas o a partir de qué porcentaje de votos se puede acceder a él. 

Está presidida, dirigida y coordinada por el presidente del Congreso. La integran: cuatro vicepresidentes y cuatro secretarios, que serán elegidos por el Pleno al inicio de cada Legislatura.

Las miradas apuntan ahora a Vox que tras haberse convertido en la tercera fuerza parlamentaria llega con la incógnita de ver si entra o no en la Mesa. 

Qué proponen los partidos

Por un lado, el PSOE y Unidas Podemos ya han anunciado que su intención es que ninguna silla sea ocupada por ningún miembro del partido de ultraderecha. Algo que secundan el PNV, Más País y Compromís. 

Al mismo tiempo, el grupo de Pedro Sánchez plantea ceder un puesto de la Mesa a ERC de cara a una futura investidura

Al otro lado del tablero se encuentra el PP que sigue haciendo fuerza para que Vox y Ciudadanos formen parte. Los de Abascal ya han avisado a los populares de que participar en el cordón sanitario de los partidos de la izquierda podría tener serias consecuencias en los acuerdos que sustentan algunas comunidades entre los dos grupos. 

Teniendo en cuenta que Vox cuenta con 52 votos y que el PP tiene asegurados con sus votos una Vicepresidencia y una Secretaría, para que el PSOE y Unidas Podemos impidan la entrada del partido de Santiago Abascal deberán sumar en cada votación un mínimo de casi 160 votos. El precio se encarece si, además de vetar a Vox, quieren la Vicepresidencia Primera, pues en esa votación necesitarán dedicar 93 votos para ganar el PP y al menos dos veces 53 para superar a Vox: total, unos 200 votos.

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