Estado de alarma

El miedo está en la frontera: Castilla y León no quiere 'invasiones' desde Madrid

Mascarilla farmacia
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Europa Press

Acceder o no a la Fase 1 de la desescalada en la pandemia del coronavirus que afecta a España tiene consecuencias inmediatas: las comunidades autónomas a las que el ministro Salvador Illa ha dado luz verde este viernes podrán subir un escalón que da acceso a abrir negocios, acceder controladamente a las terrazas de bares... Un auténtico lujo dentro del confinamiento absoluto que ha vivido el país hasta hace dos semanas, cuando el Gobierno de Pedro Sánchez acordó que los niños menores de 14 años podían salir a jugar en determinados tramos horarios. Esta semana, el movimiento se completó con la autorización para hacer deporte y pasear por las calles, manteniendo distancias de seguridad.

El inicio de la Fase 1 tiene riesgos. El propio Sánchez ha avisado de que la seguridad plena no existe y ha hecho un llamamiento a la responsabilidad. Y eso 'entre vecinos' se sabe.

En Castilla y León preocupaba la posibilidad de que la Comunidad de Madrid puediera entrar a formar parte de los elegidos por Sanidad para acceder a la fase 1. Isabel Díaz Ayuso, presidenta regional madrileña, así lo quería, hasta el extremo de haber tenido que prescindir de su directora general de Salud, que se negó a firmar el documento que se debía enviar al Ministerio. Madrid ha sido finalmente frenada en sus pretensiones y no podrá sumarse a la fase 1.

"Después de que se permitiese la salida de los niños a jugar hemos visto un incremento de los casos nuevos. Además, nosotros nos queremos proteger de las comunidades limítrofes. Si Madrid pasa a fase 1, nos podrían entrar por las fronteras que compartimos", decía a La Información  José Luis Almudí, presidente del Colegio de Médicos de Valladolid, antes de que se conociese la decisión de Sanidad.

"Castilla y León quiere protegerse en su confinamiento, para saber si el incremento de casos detectado es por niños que puedan ser portadores asintomáticos o por personas que no están cumpliendo las medidas indicadas. Gente que anda, corre, va en bicicleta sin respetar horarios ni distancias. De hecho, la gente está fuera todo el tiempo que quiere", insistió Almudí.

"No queremos pensar que los incrementos se deban a la salida de los niños sino a la mayor realización de pruebas diagnósticas; pero ese repunte se ha dado y de ser por el primer motivo se estaría favoreciendo la transmisión comunitaria de la enfermedad. Y en este asunto la Castilla y León quiere ser prudente", sentenció Almudí.

Indirectamente, Almudí, que es médico de Atención Primaria, señalaba al éxodo desde Madrid cuando se cerraron los colegios, las residencias de estudiantes, las universidades y los colegios mayores hace casi dos meses como uno de los vehículos que 'transportó' el coronavirus a Castilla y León. "Esto ha pasado. El caso de Segovia es claro".

"Con estos movimientos se centrifuga todo", dijo Almudí, en referencia a la movilidad que se le daría al virus si Madrid lograba desescalar. "No creo que el Gobierno tenga capacidad para controlar que personas de una provincia no pasen a otras".

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