Militantes socialistas lusos convocados para reelegir a António José Seguro

Lisboa, 13 abr.- Cerca de 45.000 militantes del Partido Socialista luso tienen previsto reelegir hoy al secretario general, António José Seguro, que tras dos años en el cargo busca un respaldo fuerte para liderar la oposición en plena crisis económica.

Seguro espera una victoria con una mayoría clara frente al único rival, el militante de base Aires Pedro, que sólo concurre en siete secciones de las 700 totales del partido.

Los electores deben votar también a los 1.825 delegados que decidirán la estrategia del partido y de la futura Comisión Nacional en el XIX Congreso Nacional, que se celebrará entre el 26 y el 28 de abril en Santa Maria da Feira, en el norte de Portugal.

Este será el último congreso de esta legislatura, por lo que la elección debe confirmar el próximo candidato socialista a primer ministro.

Seguro sucedió como secretario general al ex primer ministro José Sócrates tras lograr en julio de 2011 el apoyo de casi tres tercios de los votantes del partido frente a su único rival Francisco Assis, ex líder del grupo parlamentario socialista.

Un mes antes, Sócrates perdió las elecciones anticipadas tras seis años en el Gobierno frente a Pedro Passos Coelho, del Partido Social Demócrata (PSD, centro-derecha).

Seguro, discreto opositor del legado del ex primer ministro, tomó el relevo, dirigió la renovación interna de los socialistas y encabezó una oposición que pedía límites a las medidas de austeridad.

En los últimos meses, el dirigente ha endurecido el discurso con fuertes críticas a los recortes y a las tesis alemanas de austeridad en Europa.

El grupo socialista presentó el 3 de abril la primera moción de censura en el Parlamento contra el Ejecutivo, rechazada por la mayoría parlamentaria del PSD y los democristianos CDS-PP.

Seguro pidió también la dimisión del Gobierno y la convocatoria de elecciones anticipadas, tras el fallo del Tribunal Constitucional, que declaró la semana pasada ilegales varias medidas de los Presupuestos de 2013.

Los socialistas, que firmaron el acuerdo del préstamo de 78.000 millones de euros con los acreedores internacionales, han insistido en reclamar una renegociación de las condiciones del rescate.