Los vecinos de Puente Arce (Cantabria) pueden respirar tranquilos. Uno de ellos dio la voz de alarma cuando comprobó que en una de las bolsas de basura arrimada a los contenedores se veían unos huesos humanos. Ante el hallazgo llamó a la Guardia Civil, quien se hizo cargo de la investigación.
Al final todo se trata de un malentendido. Los agentes han podido saber que los restos humanos fueron depositados en bolsas de basura, junto a otros efectos, por el padre de una estudiante de medicina.
De las gestiones practicadas, la citada estudiante había obtenido diferentes huesos humanos del cementerio de Ciriego, bajo recibo, para los estudios que realiza. Coincidiendo que la citada estudiante se encuentra en viaje de estudios, su padre al realizar una limpieza en el trastero de la casa familiar, depositó los mismos, junto a otros efectos en bolsas.
La Guardia Civil aclara que de lo actuado se deduce que al pasar en la tarde de ayer el servicio de recogida de basuras, se rompió una de las bolsas de donde cayeron los citados restos, quedando en la bolsa otros.
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