La mitad de los españoles tiene miedo de perder su empleo por la crisis del Covid

Casi la mitad de la población española, sobre todo en el ámbito del sector privado, cree que la crisis económica y laboral en la que nos ha metido el coronavirus es un riesgo a la hora de mantener su puesto de trabajo. Así se deriva de la encuesta que ha realizado el Instituto Dym para el Grupo Henneo - La Información, que revela que un 7,1% de los consultados asegura que ya se ha quedado sin trabajo y hay más de un 15% que cree muy probable que le ocurra lo mismo. Solo un 45,9% de los trabajadores asegura que no hay riesgo de quedarse en paro por la pandemia, algo que, como es lógico predomina aún más cuando se analiza el caso de los empleados públicos (54%), si bien es también significativo que incluso un 39% de ellos sí ve algún tipo de riesgo en perder su contrato.

Puestos en esa tesitura de desempleo y ajustes laborales masivos a partir de este mes de abril, la encuesta de Dym demuestra además que hasta un 56,6% de los ciudadanos aceptaría una rebaja temporal de sus salarios si con ello se puede salvar el contrato y mejorar la situación de la empresa o el organismo en el que trabaja. En este caso, la solidaridad es igual en el caso de las empresas privadas y el sector público, si bien hay que tener en cuenta que casi un 38% de los consultados advierte que nunca admitiría un recorte.

Lo que sí parece que va a sufrir con la crisis del coronavirus es el consumo doméstico y las decisiones de inversión de los ciudadanos. Hasta un 57,7% de las personas encuestadas admite que ha decidido retrasar alguna compra o gasto que tenía previsto antes de la pandemia, mientras que solo un 37,8% asegura que no. En este aspecto, las compras paralizadas se centran más (hasta un 70%) en las capas más jóvenes de la población, de menos de 45 años, que en los mayores de esa edad.

El barómetro del mes de abril que ha realizado Dym para La Información rebaja aún más la valoración que los ciudadanos hacían de la gestión de la crisis por parte de Pedro Sánchez y su equipo hace apenas un mes. La nota media que se deriva de las respuestas de los 1.000 encuestados de la muestra, obtenidas entre el 23 y el 25 de abril pasados, se queda en un 3,7 sobre 10, dos décimas menos que en el dato de marzo. Aunque hay más de un 40% de la población que puntúa al Gobierno por encima del aprobado, resulta muy decisivo en el dato medio que casi la cuarta parte de los encuestados ponen un cero a la estrategia mantenida hasta ahora por el Ejecutivo.

De forma paralela a esa percepción, los resultados del barómetro confirman que hay un 55,6% de españoles que consideran que el actual Gobierno no está capacitado para sacar al país de la crisis en la que la pandemia le ha metido, frente a poco más de la tercera parte que sí le cree preparado para hacerlo. Como es lógico, la desconfianza destaca especialmente en los votantes de PP, Vox y Ciudadanos y en el espectro que va desde el centro a la extrema derecha. Como solución a ese descrédito en el Ejecutivo de coalición PSOE-UP, una mayoría del 46% de los consultados por Dym hace apenas cuatro días considera que lo más efectivo sería tener un nuevo Gobierno de concentración entre el los socialistas y el PP, una opción que no solo tiene una mayoría de adeptos en la derecha, sino que hasta un 48% de los votantes del PSOE cree que las cosas irían mejor de esta manera que con la izquierda de Iglesias, frente a solo un 33% que lo rechazan.

A pesar de ello, el enfrentamiento entre los partidos para llegar a acuerdos que traigan medidas económicas o sanitarias que nos saquen de la crisis es también evidente, sobre todo porque una mayoría de la población no percibe que haya una voluntad clara en los partidos para ponerse de acuerdo en algo. Ciudadanos, con reducida capacidad de negociación dada su caída en las últimas elecciones, es el partido donde más se cree que hay ganas de llegar a pactos (un 55%), con un nivel muy similar al PSOE. Pero esos porcentajes se quedan en una quinta parte cuando se trata de partidos nacionalistas o de la extrema derecha.

En lo que respecta a la estimación de voto, aunque esa no sea una de las grandes preocupaciones de los ciudadanos en plena crisis sanitaria y social por el virus, los resultaos de abril son muy similares a los de marzo. El desgaste del PSOE en el Gobierno se deja notar con un 25,1% de apoyo electoral, es decir, un punto y medio menos que hace un mes y 3,2 puntos menos que en las elecciones del pasado 10 de noviembre. El PP mantendría su mejora de un punto, con un 22,4% y el resto de fuerzas políticas apenas mueven sus posiciones.