Muere Tomás Rodríguez Bolaños, alcalde socialista de Valladolid entre 1979 y 1995

  • Muchos compañeros trazaban un paralelismo entre lo que Felipe González había supuesto para España y el fallecido para la capital del Pisuerga.
Tomás Rodríguez Bolaños felicita a Óscar Puente tras ser investido este último como alcalde de Valladolid. R. GARCÍA EFE
Tomás Rodríguez Bolaños felicita a Óscar Puente tras ser investido este último como alcalde de Valladolid. R. GARCÍA EFE
Tomás Rodríguez Bolaños felicita a Óscar Puente tras ser investido este último como alcalde de Valladolid. R. GARCÍA EFE
Tomás Rodríguez Bolaños felicita a Óscar Puente tras ser investido este último como alcalde de Valladolid. R. GARCÍA EFE

El que fuera alcalde de Valladolid entre 1979 y 1995, el socialista Tomás Rodríguez Bolaños, ha muerto tras sufrir un desvanecimiento cuando subía las escaleras del peñón de San Juan de Gaztelugatxe, en Vizcaya.

Fuentes socialistas y del Departamento Vasco de Seguridad han informado a Efe de que el suceso ocurrió en torno a las tres de la tarde y fue una llamada telefónica la que alertó a los servicios de emergencia de que un hombre se había desmayado cuando subía la larga escalinata que lleva a la ermita del citado peñón, muy conocida y visitada por ser escenario de la serie 'Juego de Tronos'.

Un helicóptero de la Ertzaintza se desplazó al lugar y su dotación trató de reanimar a Rodríguez Bolaños hasta la llegada de las asistencias sanitarias, desplazadas en otro helicóptero del Servicio Vasco de Salud, Osakidetza, pero sólo pudieron certificar el fallecimiento.

Consternación en el PSOE

El fallecimiento de Rodríguez Bolaños ha causado gran impacto en la ciudad de Valladolid, especialmente entre representantes institucionales y de los partidos políticos, que se han sumado rápidamente al dolor de la familia y el PSOE. El primero en reaccionar ha sido el alcalde de Valladolid, Óscar Puente, quien ha expresado su "consternación absoluta": "Un gran hombre, gran socialista y gran amigo", ha expresado a través de su cuenta de la red social Twitter.

Muy querido por todo el socialismo vallisoletano, Rodríguez Bolaños fue el primer alcalde de Valladolid tras la dictadura franquista, lo que ha recordado en su mensaje Puente, quien ha subrayado que "es un golpe durísimo". También el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha expresado hoy su pesar por la muerte repentina del político, quien en su opinión deja un legado de "municipalismo, transformación y compromiso. Las grandes políticas comienzan de abajo a arriba", ha añadido. El mensaje del presidente está ilustrado con una imagen reciente del exregidor en el puente de Poniente, con el río Pisuerga de fondo.

El secretario general del PSOE de Castilla y León, Luis Tudanca, también ha expresado su dolor por Rodríguez Bolaños, quien en su opinión deja "el corazón encogido a todo el socialismo y a toda Valladolid". Sus oponentes políticos también han lanzado mensajes de solidaridad con la familia y el PSOE, como el PP, que ha enviado un comunicado de pésame y su presidente provincial, Jesús Julio Carnero, quien ha dedicado a los socialistas "un fuerte abrazo en estos tristes momentos".

Se ha sumado a estas muestras de cariño Izquierda Unida, que ha expresado que hoy es día de acordarse "de los socialistas de Valladolid, que han perdido a alguien como Tomás Rodríguez Bolaños".

El 'Felipe' del socialismo vallisoletano

Hay consenso en el socialismo vallisoletano sobre lo que representaba la figura del que fuera primer alcalde de la ciudad después de la dictadura, Tomás Rodríguez Bolaños, una especie de 'totem' a quien todos respetaban y a quien la mayoría consultaba.

Muchos compañeros trazaban un paralelismo entre lo que Felipe González había supuesto para España y lo que Rodríguez Bolaños había conseguido para la capital del Pisuerga: la transformación de ambas realidades con proyectos innovadores para la época, marcada por la expansión de Valladolid, siempre de la mano de la histórica FASA-Renault, su gran pulmón industrial.

De sus fábricas emergió precisamente la figura sindical y política de Bolaños, ya que en FASA ejerció de técnico de laboratorio y analista químico y de allí salió despedido por su papel en la huelga de 1975, aunque fue readmitido dos años más tarde por la amnistía laboral.

Para entonces ya era afiliado de la UGT y del PSOE, y tras foguearse como secretario del Metal del sindicato, se produjo su salto a la política al encabezar la lista socialista en la recuperada democracia con las elecciones municipales de 1979, celebradas el 3 de abril.

Ya como alcalde, en 1980 fue miembro de la delegación española en la Conferencia de Poderes Locales y Regionales del Consejo de Europa, de la que fue elegido su presidente en 1983.

Los proyectos de Bolaños para la ciudad de Valladolid comenzaron a coger vuelo y el auge del PSOE de Felipe González a nivel nacional le impulsó para revalidar sus mandatos, primero en 1983 -cuando además fue elegido como procurador autonómico- y posteriormente en los sucesivos hasta 1995. Pero por el camino fue elegido en 1985 presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), en la que sucedió al entonces alcalde de Zaragoza, Ramón Sainz de Baranda, y posteriormente fue reelegido para el mismo cargo en 1987.

La primera derrota electoral de Bolaños se produjo en 1991, cuando el PP, ya liderado por Javier León de la Riva, obtuvo un concejal más que los socialistas, pero el alcalde se mantuvo en el cargo gracias al acuerdo con los concejales del CDS y de IU.

En clave de retirada municipal, Bolaños encabezó la candidatura del PSOE por Valladolid en las elecciones generales del 6 de junio de 1993, cuando consiguió el acta de diputado, pero fue la antesala de su derrota definitiva el 28 de mayo de 1995, cuando el PP obtuvo la mayoría absoluta que encumbró a León de la Riva, su particular 'Aznar'.

Renovó su acta de diputado por Valladolid el 12 de marzo del 2000 y días más tarde, fruto de su ascendencia y trayectoria dentro del PSOE, fue elegido por el Comité Federal para integrar la gestora nacida tras la dimisión de la Ejecutiva liderada por Joaquín Almunia, a causa de la severa derrota sufrida por el PSOE en las generales.

Entre otros reconocimientos, Rodríguez Bolaños recogió la Gran Cruz al Mérito Militar con distintivo blanco de España y la Gran Cruz al Mérito de la Ciudad de Bogotá, y fue Hijo Predilecto de la Habana, pero de lo que siempre presumió fue de su mujer y sus tres hijos.

Mostrar comentarios