Mueren seis personas en Líbano en combates entre el Ejército y yihadistas

Beirut, 26 oct.- Al menos seis personas -dos civiles y cuatro militares- murieron hoy y otras diez resultaron heridas en el norte del Líbano en enfrentamientos entre el Ejército y combatientes yihadistas.

La Agencia Nacional de Noticias (ANN) dijo que elementos armados atacaron un contingente militar en la ruta que une las ciudades de Hanin y Mahmara, en la región de Akkar, limítrofe con Siria, cuando perseguían a un grupo de extremistas.

"Al menos cuatro militares murieron, dos oficiales y dos soldados, y otros nueve resultaron heridos", informó la ANN.

La agencia señaló que los combates, en los que se han empleado proyectiles y ametralladoras, se desarrollan en zonas de Dhur Bahnin, Beit Ajaj, Rihaniyeh y Nahr el Bared.

La ANN también indicó que hay bajas entre los muyahidines, aunque no ofreció cifras, así como que un civil palestino resultó herido al ser alcanzado por una bala perdida en el campamento de refugiados de Nahr el Bared.

Ante el deterioro de la situación en el norte del Líbano, el ministro de Educación Elias Abu Saab anunció hoy que los colegios privados y públicos permanecerán cerrados mañana, mientras que los responsables políticos y religiosos de Trípoli instaron a un alto el fuego inmediato.

"Instamos a un alto el fuego inmediato para permitir la evacuación de los heridos y la entrada de ayuda humanitaria", declaró el diputado Mohamad Kabbara después de una reunión en su residencia que congregó a los responsables religiosos y políticos de la ciudad para discutir sobre la situación.

Al menos 27 soldados y policías están en manos del EI y del Frente al Nusra -filial de Al Qaeda en Siria- desde agosto pasado, cuando el ejercito combatió contra los miembros de esos grupos extremistas en la región de Arsal, limítrofe con Siria, dejando en las filas castrenses 19 muertos y 86 heridos.

Desde el estallido del conflicto en la vecina Siria, en marzo de 2011, han aumentado los atentados, secuestros, enfrentamientos armados y otros actos violentos en el Líbano, dividido entre los partidarios y detractores del presidente sirio, Bachar al Asad.