Museos e instituciones, salvo Congreso y Senado, abrirán sus puertas el 12-O

Madrid, 30 sep.- Numerosos museos e instituciones, salvo el Congreso y el Senado, abrirán sus puertas a los ciudadanos con motivo de la celebración de la Fiesta Nacional, el 12 de octubre, cuyo tradicional desfile, que contará con la participación de unos 3.000 militares, cambia de escenario.

El Congreso de los Diputados y el Senado han rechazado la idea de abrir sus puertas ese día, como en un principio había planteado el Gobierno, que pretende convertir el 12-O en una jornada de mayor difusión y divulgación de las instituciones políticas y culturales, así como de participación ciudadana, más allá del desfile militar.

Fuentes parlamentarias del Congreso y Senado han explicado a Efe que ya cuentan con sus propias jornadas de puertas abiertas: el Congreso el 7 y 8 de diciembre y el Senado el 30 de noviembre y el 1 de diciembre.

Además, argumentan que debido a las elecciones generales del 20 de noviembre ambas cámaras se encuentran actualmente disueltas.

Abrirán sus puertas, con entrada gratuita, museos como el Prado, el Reina Sofía y el Thyssen, así como la Biblioteca Nacional, el Instituto Cervantes, la Casa América, el Ayuntamiento de Madrid o el Cuartel General del Ejército.

Por otra parte, el desfile militar cambiará este año de recorrido y el próximo 12 de octubre la tribuna de autoridades se instalará en la plaza de Neptuno. Los militares marcharán desde Atocha hasta Colón.

Los últimos años la tribuna se situó en la plaza de Lima y los militares desfilaron por el paseo de la Castellana, desde la plaza de Lima hasta Nuevos Ministerios.

Fuentes militares han apuntado a Efe que este año desfilarán unos 3.000 militares, 150 vehículos y 50 aeronaves, cifras similares a los años anteriores.

Está previsto que el rey, convaleciente de la operación del tendón de aquiles del pie izquierdo a la que se sometió el pasado 5 de septiembre, presida el tradicional desfile.

Don Juan Carlos y Doña Sofía estarán acompañados por miembros de la Familia Real, los presidentes del Gobierno, del Congreso y del Senado, ministros y autoridades nacionales, autonómicas y locales.

Tras el desfile, los Reyes ofrecerán la tradicional recepción en el Palacio Real a representantes de diversos ámbitos sociales, si bien con alguna variación respecto a años anteriores, debido al proceso de recuperación de don Juan Carlos tras su intervención quirúrgica, informan fuentes de la Casa del Rey.

La idea de dar un giro a la celebración de la Fiesta Nacional surgió el año pasado, tras escucharse silbidos y abucheos de una reducida parte del público durante la ceremonia de homenaje a los caídos.

Entonces, la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, y la ministra de Defensa, Carme Chacón, se propusieron cambiar el protocolo para este tipo de actos.

Sin embargo, esta idea no llegó a materializarse al abandonar el Ejecutivo la vicepresidenta días después, el 20 de octubre, en una remodelación del Gobierno llevada a cabo por José Luis Rodríguez Zapatero.