Katmandú.- Con un Gobierno interino desde julio de 2010 y el proceso de paz estancado, Nepal intenta mañana escoger primer ministro en una votación parlamentaria con los mismos candidatos que hasta ahora no han progresado y la incorporación a la votación de un líder de la importante minoría madheshi.
Los líderes del Partido Maoísta, Pushpa Kamal Dahal "Prachanda"; del Partido del Congreso nepalí, Ram Chandra Poudel; del Partido Marxista-Leninista, Jhala Nath Khanal, y del Foro regionalista Madheshi, Bijaya Kumar Gachhedar, presentaron hoy sus candidaturas para el puesto.
Intentarán reemplazar al marxista-leninista Madhav Kumar Nepal, quien dimitió el 30 de junio de 2010 a cambio de que los maoístas aprobaran prorrogar un año (hasta fines de mayo próximo) el mandato de la Asamblea Constituyente, y sigue desde entonces como "interino".
Los tres primeros habían presentado ya sus candidaturas en la anterior ronda de votaciones -entre julio y noviembre del año pasado- mientras que el foro de la minoría madheshi es la cuarta mayor fuerza y su voto de apoyo a unos u otros se consideraba hasta ahora fundamental para el triunfo.
Tras la votaciones infructuosas, siguió un periodo de búsqueda de consenso que tampoco ha dado resultados en el que la misión de la ONU que supervisaba el acantonamiento de la guerrilla maoísta -parte esencial del acuerdo de paz de 2006- ha decidido abandonar el país.
"Como los tres partidos principales no lograron llegar a un consenso, hora le toca a un partido madheshi liderar el Gobierno", declaró hoy el candidato del Foro.
Prachanda se había declarado convencido de atraerse esta vez el voto de la minoría madheshi (80 representantes), pero la candidatura regionalista acorta de forma decisiva sus posibilidades de éxito.
El fiasco de las rondas anteriores, con 16 votaciones fallidas, ha llevado al Parlamento nepalí a revisar las normas de elección y en esta ocasión habrá un máximo de tres, según dijo a Efe el portavoz de la secretaría del Parlamento, Mukunda Sharma.
"En la tercera ronda de votación, solo los dos candidatos más votados de la segunda podrán participar", afirmó Sharma.
"Esto significa que la tercera ronda será entre Prachanda y Poudel. Las posibilidades de ser elegido son mayores para Poudel", interpretó a Efe el director del diario "The Himalayan Times", Ajaya Bhadra Khanal.
El Partido Maoísta y el Congreso nepalí son las dos mayores fuerzas parlamentarias de Nepal, con 238 y 113 escaños (la Asamblea tiene 601), respectivamente, pero ninguno se acerca por sí solo a la mayoría absoluta requerida para lograr el puesto.
Si ningún candidato lograra hacerse con la victoria al término de la tercera ronda, prevista para el 6 de febrero, habría que repetir el proceso desde el principio, según la nueva regulación.
El Ejecutivo en funciones es una coalición de grupos no maoístas encabezada por el Partido Comunista Marxista-Leninista.
El Partido Maoísta obtuvo mayoría simple en las elecciones de 2008 y Prachanda encabezó brevemente el Gobierno.
La votación de mañana no es solo un juego de alianzas políticas, y se entrecruza con el delicado proceso de paz de Nepal, que comenzó en noviembre de 2006 tras un acuerdo entre la guerrilla maoísta y el Gobierno que puso fin a una década de guerra.
Los marxista-leninistas y el Congreso nepalí se oponen a que los maoístas formen de nuevo Gobierno mientras no se resuelva el asunto de la reintegración de sus ex combatientes, 19.602 personas acantonadas en campamentos y a la espera de solución.
Hasta ahora, los ex guerrilleros habían sido supervisados por la misión de la ONU en Nepal, pero la delegación abandonó el país en enero tras no ser prorrogado su mandato, y la vigilancia depende ahora de un comité dirigido por el primer ministro.
También sigue sin avanzar el otro gran contencioso de la transición nepalí, la redacción y aprobación de una Constitución a cargo de la actual Asamblea, que se ha fijado como fecha de plazo el próximo 28 de mayo, al filo de su propio mandato.
"Si no se forma un Gobierno tras la tercera ronda, podría haber una posible ampliación de seis meses del plazo para la redacción de la Constitución", observó Khanal.
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