"Esta reunión fue programada hace dos semanas", antes de que estallara la controversia, dijo este responsable que pidió el anonimato. Netanyahu se reunirá con todos los candidatos a la sucesión del presidente Barack Obama, del partido que sean, que viajen a Israel y expresen el deseo de hacerlo, agregó.
El multimillonario estadounidense, candidato a la investidura republicana, provocó una ola de indignación internacional al defender que se prohíba la entrada de los musulmanes en Estados Unidos.
Israel tiene una población de ocho millones de habitantes, un millón de los cuales son musulmanes, según estadísticas oficiales israelíes.
El propio Netanyahu había provocado una fuerte polémica con unas declaraciones sobre los árabes israelíes, muchos de ellos musulmanes, el día de las elecciones legislativas israelíes, el 17 de marzo de 2015.
El primer ministro israelí blandió en esa ocasión la amenaza de electores árabes llevados "en masa" a los colegios electorales en autocares fletados por sus contrincantes para derrotar a su gobierno.
Posteriormente se disculpó por esas palabras y se empleó en tratar de reparar los daños con la minoría árabe israelí.
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