Occupy Central pide la disolución del Consejo Legislativo de Hong Kong

  • Benny Tai, el fundador de una de las organizaciones que lidera las protestas Occupy Central, pidió hoy al jefe del Ejecutivo de Hong Kong que disuelva el Consejo Legislativo si no es aprobada la polémica reforma electoral el próximo año y que ha desencadenado las manifestaciones prodemocráticas.

Hong Kong, 1 nov.- Benny Tai, el fundador de una de las organizaciones que lidera las protestas Occupy Central, pidió hoy al jefe del Ejecutivo de Hong Kong que disuelva el Consejo Legislativo si no es aprobada la polémica reforma electoral el próximo año y que ha desencadenado las manifestaciones prodemocráticas.

Según Tai, la disolución de la cámara legislativa, que tendría que llevar a cabo el jefe del Gobierno, Leung Chun-ying, sería una forma de resolver el estancamiento político en el que se encuentra ahora Hong Kong, dijo en declaraciones a la emisora de radio local RTHK.

El Parlamento local tendrá que votar el año que viene la reforma electoral propuesta por Pekín, que recoge que los ciudadanos de Hong Kong podrán votar al jefe del Ejecutivo en 2017 pero elegirán entre un número reducido de candidatos previamente escogido por un comité afín al régimen.

Para Occupy Central, la reelección de nuevos miembros del Consejo Legislativo de Hong Kong equivaldría a un referéndum sobre la propia reforma electoral, puesto que los nuevos candidatos serían elegidos en función de su disposición a votar a favor o en contra de ella.

Ese veto a la selección de los candidatos fue la mecha de la campaña de desobediencia civil que pusieron en marcha varias organizaciones estudiantiles junto a Occupy Central, y que derivó en masivas protestas y la ocupación de varias calles de Hong Kong, que llevan tomadas por los activistas desde hace más de un mes.

El presidente del Consejo Legislativo, Tsang Yok-sing, rechazó la propuesta de Tai al considerar que incluso si la reelección de nuevos parlamentarios diera más asientos a aquellos prodemocráticos, no podría llegarse a la conclusión de que la gente de Hong Kong se opone a la reforma política planteada por Pekín.

Mientras, los manifestantes continúan sus asentamientos en tres zonas de la ciudad desde donde siguen reclamando "elecciones libres".

Un mes después de que se iniciaran las protestas, más de dos mil tiendas de campaña siguen en las zonas ocupadas, si bien las voces contrarias al movimiento prodemocrático también continúan haciéndose oír desde diferentes sectores.

El jefe ejecutivo de HSBC Asia-Pacífico, Peter Wong Tung-shun, el mayor inversor bursátil en el parqué de Hong Kong, explicó estos días que tanto las industrias de banca minorista y de inversión se habían visto afectadas por el movimiento democrático en curso.

"Algunos inversores que originalmente planeaban invertir en Hong Kong ahora dicen que pueden esperar y ver primero. Este tipo de actitud tendrá un impacto severo en Hong Kong", señaló Wong al diario local South China Morning Post.

A sus declaraciones se sumaron hoy las del director ejecutivo de la Federación de Propietarios de Hoteles Hong Kong, Michael Li, quien confirmó un descenso del 30 por ciento interanual en las reservas de hoteles desde mediados de octubre, semanas después de que arrancaran las protestas, según dijo a la emisora RTHK.

Mostrar comentarios