Ontinyent no podrá personarse en pleito para pedir herencia de 23 millones

  • El Ayuntamiento de Ontinyent ha aprobado hoy una moción para reclamar formalmente al Arzobispado de Valencia la herencia de 23,3 millones de euros que la vecina María Nadal Guerrero legó en 1978 a la comunidad parroquial de esta población, pero no podrá personarse como parte afectada en un posible pleito.

Valencia, 29 sep.- El Ayuntamiento de Ontinyent ha aprobado hoy una moción para reclamar formalmente al Arzobispado de Valencia la herencia de 23,3 millones de euros que la vecina María Nadal Guerrero legó en 1978 a la comunidad parroquial de esta población, pero no podrá personarse como parte afectada en un posible pleito.

Según han informado a EFE fuentes del consistorio, la moción presentada por el portavoz de Compromís, José Antoni Francés, ha contado con los votos favorables de la coalición valencianista, del PSPV-PSOE y de EUPV, mientras que los diez concejales del PP se han abstenido.

No obstante, los servicios jurídicos del Ayuntamiento han determinado la imposibilidad de que el Gobierno Local se personara como parte interesada en un pleito contra el Arzobispado para reclamar que esa herencia revertiera en el municipio y se administrara de forma transparente.

Por lo tanto, el consistorio deberá limitarse a actuar como mediador e interlocutor con el Arzobispado de Valencia para negociar el posible retorno de la herencia a las instituciones que la fallecida determinaba en su testamento.

La herencia estipulaba una cantidad de 11,3 millones de euros destinados a la parroquia de Santa María, mientras que 5,8 eran para Cáritas Interparroquial y otros 5,8 a la casa de ejercicios espirituales de Santa Anna.

En un principio, la moción planteaba la posibilidad de interponer un pleito, si fuera necesario, para defender los intereses de los ciudadanos de Ontinyent, a quienes se les considera perjudicados por no poder controlar, gestionar y beneficiarse de la cantidad legada, que se encuentra en las arcas del Arzobispado de Valencia.

Después de veintitrés años de la muerte de esta vecina, que fue proclamada hija predilecta de la localidad a título póstumo en 2005 como reconocimiento de dicha herencia, el Ayuntamiento ha aprobado el planteamiento de la moción que considera la herencia perteneciente al municipio por tratarse de su comunidad parroquial.

La iniciativa del consistorio tratará de continuar los intentos fallidos por parte de las iniciativas ciudadanas que también intentaron garantizar la devolución de la cantidad legada por parte del Arzobispado de Valencia a las entidades de la localidad.

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