Pajín dice que "en absoluto" el Gobierno ha reconocido la soberanía marroquí en Sáhara

Madrid.- La secretaria de Organización del PSOE, Leire Pajín, ha asegurado hoy que el Gobierno no ha reconocido "en absoluto" la soberanía marroquí sobre el Sáhara Occidental y ha acusado a Mariano Rajoy, de "ignorancia o mala fe" al vincular la vuelta de Aminatu Haidar con los intereses agrícolas de Marruecos.

"Quien se merece tomates, en el sentido popular de la expresión, es la oposición del PP", el único partido que "no ha movido ni un solo dedo" para ayudar a Haidar, ha subrayado Pajín en la rueda de prensa ofrecida tras la última reunión de la Ejecutiva socialista del año.

Pajín ha tachado a los populares de "irresponsables" al decir que los socialistas han variado su posición respecto al Sáhara Occidental y ha garantizado que ni el Gobierno ni el PSOE reconocen la soberanía de Marruecos en la zona.

A su juicio, es grave que a los populares se les "llene ahora la boca" hablando de los saharauis cuando "nunca alzaron la voz" desde el Gobierno y, de hecho, rebajaron al mínimo histórico la ayuda oficial a los campamentos de Tinduf (Argelia).

Pajín ha asegurado que su postura "ha sido, es y será la misma: buscar una solución definitiva y justa que, por supuesto, contemple el derecho a la autodeterminación del pueblo saharaui, como le reconoce la ONU".

Según ha subrayado, que el Gobierno haya dicho en un comunicado que, mientras se resuelve el contencioso, "constata que la Ley marroquí se aplica en el territorio del Sahara Occidental" no supone reconocer "absolutamente en ningún caso" la soberanía marroquí sobre la ex colonia española.

Pajín ha acusado además al PP de "faltar a la verdad" después de escuchar a Rajoy decir que Marruecos aceptó la vuelta de Haidar a cambio de un acuerdo agrícola para exportar más tomates a la UE con bajos aranceles.

El líder del PP debería saber, apuntó Pajín, que el acuerdo agrícola data de 1995 y la mayoría de las empresas que trabajan en ese sector en Marruecos son españolas.

Para la número tres de los socialistas, el PP ha vuelto a caer en su "incoherencia habitual" al exigir al Gobierno que buscara una solución para la activista saharaui y pedir dimisiones cuando lo ha logrado.

Y todo ello siendo un partido que, ha denunciado, cuando estaba en el Gobierno "ni pensaba en pedir disculpas a los ciudadanos" después de "negligencias" como el accidente del Yak-42 o el hundimiento del Prestige.

En la misma línea, ha criticado que el PP haya relacionado el secuestro de los tres cooperantes catalanes en Mauritania con la debilidad de la política exterior y ha lamentado que sea "capaz de cualquier cosa con tal de dañar la imagen del Gobierno".

Ante ese ejemplo de "deslealtad" al Ejecutivo, ha recordado al PP que "en política no vale todo" y ha confiado en que sus dirigentes aprendan la lección para no volver a utilizar un tema tan delicado con el único fin de desgastar al Gobierno.

Ha reclamado además prudencia y unidad a los partidos y a los medios de comunicación, la mejor garantía de que el secuestro pueda "tener un final feliz y lo antes posible".