París advierte de que la quiebra de Grecia dejaría frágiles a España o Italia

París, 14 sep.- El ministro francés de Asuntos Europeos, Jean Leonetti, subrayó hoy que Grecia no quebrará ni saldrá de la zona euro porque si se produjeran esos escenarios los especuladores podrían atacar después a países como España, Italia o Portugal.

"No habrá quiebra de Grecia ni salida de Grecia del euro", aseguró Leonetti en una entrevista a la cadena de televisión "France 2", donde además lo justificó por las consecuencias que habría en otro caso.

Subrayó que no sólo "los griegos perderían un 30 % de su poder adquisitivo" sino que "la zona euro se encontraría en un juego de dominó por el que mañana los especuladores atacarían a España, luego a Italia y por qué no a Portugal".

A unas horas de la conversación telefónica sobre la crisis motivada por Grecia prevista entre el presidente francés, Nicolas Sarkozy, la canciller alemana, Angela Merkel, y el primer ministro griego, Yorgos Papandreu, el ministro se negó a adelantar medidas suplementarias en Francia.

Se resistió con el argumento de que "acelerar las cosas" puede servir para incrementar el nerviosismo de los mercados, y recordó que si las agencias de calificación han mantenido la nota máxima para la deuda de Francia es porque "ha tomado las buenas medidas".

En la misma línea que Leonetti, la portavoz del Gobierno, Valérie Pécresse, señaló por su parte que al término del consejo de ministros que tanto Sarkozy como su primer ministro, François Fillon habían "reafirmado la determinación de Francia para hacer todo lo posible para salvar a Grecia".

Pécresse contó que en el consejo de ministros "se ha reafirmado la solidez de la pareja franco-alemana" en defensa de la zona euro, pero también la necesidad de aplicar todo el paquete adoptado en la cumbre europea del pasado 21 de julio y de "contrapartidas" por parte de Grecia.

Esta última cuestión, precisó la portavoz, estará en el centro de la conferencia telefónica Sarkozy-Merkel-Papandreu, programada esta tarde al cierre de las bolsas europeas y de la que deberían informar en primer lugar las autoridades griegas.

El responsable francés de Asuntos Europeos reiteró, por otra parte, el mensaje de que los bancos franceses "no están en peligro" porque "tienen suficientes reservas para hacer frente eventualmente a la deuda griega".

Una declaración al calor de la decisión de la agencia Moody's, que esta mañana había anunciado esta mañana que bajaba su nota a dos de los grandes franceses, Crédit Agricole y Société Générale, y que mantenía sin cambios, la del tercero, BNP Paribas, aunque continuará teniéndolo en vigilancia y con perspectiva negativa.