Santo Domingo, 11 nov.- El principal partido opositor dominicano, el socialdemócrata PRD, sigue sin superar la crisis interna por la que atraviesa tras los comicios de 2012, que podría agravarse por el impedimento de entrar hoy a la sede de la organización, pese a sentencia judicial, de una de sus dirigentes.
El último de los encontronazos en dicho partido se produjo hoy cuando dirigentes, afines a su presidente, Miguel Vargas Maldonado, impidieron la entrada a la sede principal a Geanilda Vásquez, quien, amparada por la Junta Central Electoral (JCE) y una sentencia judicial, intentó, sin éxitos, reasumir sus funciones como secretaria de organización del PRD, cuyo Consejo de Disciplina la suspendió por dos años en enero pasado.
Vásquez fue suspendida junto al secretario general de esa agrupación, Orlando Jorge Mera, por supuestas faltas de indisciplina en la organización y violación a los estatutos del partido.
Dicho Consejo también decidió en enero, en un juicio disciplinario, la expulsión del expresidente del país Hipólito Mejía, y del presidente en funciones del PRD, Andrés Bautista.
Los cuatro dirigentes han rechazado el proceso y responsabilizan de ello al presidente del Partido Revolucionario Dominicano (PRD) y excandidato presidencial Miguel Vargas Maldonado.
La crisis en el PRD es el resultado de un enfrentamiento entre Vargas Maldonado y Mejía, que se remonta a 2011, cuando ambos se enfrentaron por la candidatura presidencial del PRD, que logró el segundo en medio de denuncias de fraude del primero.
Aunque finalmente Vargas proclamó a Mejía como candidato presidencial para los comicios del 20 de mayo de 2012, es criticado por sectores del partido por mantenerse al margen de la campaña.
En medio de este enfrentamiento, la Cámara Penal del Juzgado de Primera Instancia emitió, el pasado 19 de agosto, una sentencia de amparo a favor de Vásquez, obligando de esta manera a las autoridades del PRD a restituirla de manera inmediata en sus funciones como secretaria nacional de organización de la agrupación.
Por ello, Vásquez notificó mediante carta a Vargas Maldonado su decisión de reintegrarse hoy a sus funciones para "colaborar en el proceso de reunificación de la familia perredeista y contribuir en la búsqueda de soluciones conjuntas" en las elecciones internas, previstas para el próximo año.
No obstante, la dirigente política fue impedida, por miembros de la organización, de ingresar a la Casa Nacional del PRD para el desempeño de sus funciones.
Vásquez, junto a una comisión, acudió a la sede del PRD, pero nadie le abrió las puertas del edificio.
En posteriormente declaraciones a periodistas, dijo que cuando llegó a la sede del partido le informaron que Vargas Maldonado está en el extranjero y que, por lo tanto, "no podían" dejarla ingresar al edificio.
Sin embargo, aseguró, que el pasado 7 de noviembre envió una carta a Vargas Maldonado para reunirse con él y tratar el asunto, pero que éste no le respondió.
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