Patronal, CCOO y UGT seguirán negociando el 2010 pese a haber convenios pendientes de 2009

  • Madrid.- La patronal CEOE-CEPYME y los sindicatos CCOO y UGT crearon hoy la mesa para la negociación colectiva para 2010 y, previsiblemente para 2011 y 2012, al tiempo que se comprometieron a desbloquear los convenios que todavía están pendientes para este año.

Sindicatos y patronal crean la mesa para la negociación colectiva hasta 2012
Sindicatos y patronal crean la mesa para la negociación colectiva hasta 2012

Madrid.- La patronal CEOE-CEPYME y los sindicatos CCOO y UGT crearon hoy la mesa para la negociación colectiva para 2010 y, previsiblemente para 2011 y 2012, al tiempo que se comprometieron a desbloquear los convenios que todavía están pendientes para este año.

En la reunión que mantuvieron hoy los agentes sociales en la sede de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), ambas partes fijaron el calendario para discutir la negociación colectiva de los próximos años y establecieron una primera reunión para el próximo lunes para hacer un balance de la situación económica y otra para el 7 de enero para concretar las materias objeto de discusión.

Los secretarios de Acción Sindical de CCOO, Ramón Górriz y de UGT, Tony Ferrer, presentaron a la patronal un documento con las propuestas sindicales que giran en torno a tres objetivos: mantener el empleo y el poder adquisitivo de los salarios, limitar los beneficios empresariales y la eliminación de la temporalidad injustificada.

Los sindicatos abogaron por moderar los salarios introduciendo cláusulas de revisión salarial para mantener el poder adquisitivo de los trabajadores, así como limitar los beneficios empresariales que consideran deben utilizarse para la reinversión productiva y la cualificación.

Tanto CCOO como UGT defendieron subidas salariales de entre el 1 y el 2 por ciento, o una brecha superior para los sueldos más bajos, mientras que la CEOE no fijó hoy su posición al respecto.

El secretario general de la patronal, José María Lacasa, que también habló en nombre de la CEPYME, confió en cerrar un acuerdo en materia de negociación colectiva a finales de enero para 2010 y "eventualmente" también para 2011 y 2012.

Desde que patronal y sindicatos acordaran el pasado 18 de noviembre desbloquear los convenios de 2009, se han ultimado 34 convenios colectivos, tres de ellos pendientes de firma, que afectan a 485.773 trabajadores, y otros 7, para 189.745 personas, están a punto de firmarse.

El acuerdo alcanzado hoy abre las puertas del futuro diálogo social tripartito, en el que interviene también el Gobierno, y en cuyo ámbito se discutirán reformas estructurales, entre ellas, la del mercado laboral.

En este sentido, Lacasa subrayó que se ha producido un "cambio fundamental" desde que se rompieron las negociaciones en julio porque el Gobierno "por primera vez" habla de una reforma laboral.

En respuesta a la estrategia del Gobierno sobre la Ley de Economía Sostenible, Lacasa dijo que la CEOE hará llegar esta semana al Ejecutivo un documento de casi 300 páginas con sus propuestas.

Lacasa valoró el contenido de la estrategia, pero en materia laboral dijo que "echa en falta" algunas cuestiones urgentes, como las medidas para impulsar el empleo juvenil o para la reducción de la jornada de trabajo.

Además, la CEOE insiste en sus reivindicaciones en cuanto a las cotizaciones sociales de las empresas que, en su opinión, deben rebajarse, además de los costes salariales y la contratación.

A este respecto, Tony Ferrer dijo que en la reunión de hoy no se ha hablado de futuras reformas y que se limitó a tratar los convenios colectivos.

Ferrer recordó que el diálogo social no se rompió en julio, sino que venía de antes, cuando no se renovó el acuerdo de negociación colectiva para este año.

El secretario de Acción Sindical de UGT confió en compartir con la patronal el proceso de negociación para evitar que determinados sectores lo "boicoteen".

Por su parte, Górriz admitió que las reformas son necesarias, incluida la de la propia negociación colectiva, al tiempo que se mostró dispuesto a modificar el Estatuto de los Trabajadores, siempre que no se reduzcan los derechos laborales.

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