Sánchez aseguró en 2015 que echaría a quien actuase fiscalmente como Huerta

Solo una semana después de la designación del nuevo Gobierno de Pedro Sánchez, los pilares de la ejecutiva socialista tiemblan tras salir a la luz que el ministro de Cultura y Deporte, Màxim Huerta, fue condenado en 2017 por defraudar más de 200.000 euros a Hacienda.

Pero no solo por esto, sino por unas declaraciones que realizó el propio Pedro Sánchez en 2015 en las que se comprometía a destituir a cualquier político que creara una sociedad 'pantalla' para eludir pagar más al fisco.

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En las mismas, el nuevo presidente del Gobierno fue muy claro: "Si tengo en mi dirección a un responsable político que crea una sociedad interpuesta para pagar la mitad de impuestos, esta persona al día siguiente estaría fuera de mi ejecutiva. Es mi compromiso con los votantes y con los españoles".

Lo cierto es que Màxim Huerta fue condenado a pagar 365.938 euros incluyendo recargos e intereses por los tres años de ejercicios fiscales en los que usó una sociedad constituida en 2006 cuando trabajaba como presentador de televisión.

El titular de Cultura tributó por el impuesto de sociedades y no por el IRPF, como debería haber hecho, eludiendo así "los tipos impositivos progresivos y más elevados de IRPF" y "engrosando además indebidamente el capítulo de gastos". Eso sí, sus acciones no constituyen delito porque la cantidad que dejó de pagar no llega a 120.000 euros por ejercicio.

Ante estas publicaciones, el ministro ha declarado "estar al corriente con Hacienda desde hace diez años. No hubo mala fe y no oculté nada. Cambió el criterio fiscal, hubo una regularización, pagué lo correspondiente y asunto cerrado".

En la mañana del miércoles aseveró no dimitir por este hecho, sin embargo a las 19.00 horas ha convocado una rueda de prensa para tratar el asunto.