Picaduras de araña violinista: cómo identificarlas y qué hacer si te pica una

La araña violinista o de rincón es una de las especies de arácnidos más peligrosa con una picadura que puede llegar a ser mortal, sobre todo si se trata de un niño o un adulto mayor.

La picadura de la araña de violín es peligrosa porque inocula un veneno potencialmente mortal, que disuelve los tejidos y causa la muerte celular, pudiendo ser 15 veces más tóxico que el de una cobra, además de tener un gran poder de penetración en el hígado y las vías biliares.

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Puede ser de color marrón, negra, parda, rojiza-verdosa o ceniza y de contextura más bien gruesa y pilosa, con un tamaño aproximado de 1,25 centímetros. Esta araña es fácilmente reconocible porque tiene una marca en la parte superior de su cuerpo de color café con la forma del instrumento musical que le da nombre.  

Suele esconderse en grietas y rincones de difícil acceso, de ahí su segunda denominación, le gustan los lugares recónditos y húmedos donde no tenga contacto con seres humanos. Cuando es sorprendida, reacciona con mucha rapidez e incluso saltando hasta 10 centímetros de altura.

Los síntomas de la picadura de una araña violinista son: escalofríos, picazón, sensación general de malestar, fiebre, nauseas, coloración roja o lila en un círculo, sudoración excesiva y úlcera en la zona de la picadura.

Aplicar hielo sobre la herida para frenar la velocidad de reacción y mantener a la persona en reposo. Se puede aplicar un vendaje compresivo con hielo e ir soltándolo de vez en cuando.

Es muy importante trasladarse lo más rápido posible a un centro asistencial y, en lo posible, capturar el arácnido o restos de él y llevarlos junto con el afectado para ayudar en su identificación.