En una rueda de prensa en Londres, ha asegurado que la respuestas de las instituciones y el pueblo catalán es "no tener miedo, hacer piña y tirar hacia delante".
Sobre los alcaldes, ha abogado por "una estrategia lo máximo de conjunta posible, sea la que sea", ya que, según él, a diferencia de lo que pasó en el proceso participativo del 9N la responsabilidad va para muchos.
"Si se hace piña daremos un mensaje mucho más potente: es el Estado español contra la mayoría de las instituciones catalanas. Ahora es el momento de los pasos adelante y no caer en la estrategia del miedo", ha remarcado.
En una conferencia-coloquio en la Commite Room de la Cámara de los Lores, ha asegurado que la Generalitat ha estado abierta a negociar un referéndum vinculante y todas sus condiciones, pero que el Gobierno central "no ha querido dialogar".
Ha afirmado que la mayoría de catalanes votará por un proyecto que es "crear la Dinamarca mediterránea", y ha señalado que si los catalanes se mantienen firmes, votarán.
Sobre la posibilidad de que se abra una reforma de la Constitución, Mas ha afirmado que "no hay voluntad política real" de modificar la norma, y ha considerado que solo se haría para hacerla peor para Cataluña.
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