Piden penas de más de 80 años para los procesados por el "caso Kárate"

  • Las Palmas de Gran Canaria.- El juez del "caso Kárate" ha dictado hoy el procesamiento del principal imputado, Fernando T.B., de su pareja, María José G.P, y de dos monitores, y pide penas de más de 80 años de cárcel por abusos sexuales, entre otros supuestos delitos a 61 víctimas de esta red que operaba en Gran Canaria.

Piden penas de más de 80 años para los procesados por el "caso Kárate"
Piden penas de más de 80 años para los procesados por el "caso Kárate"

Las Palmas de Gran Canaria.- El juez del "caso Kárate" ha dictado hoy el procesamiento del principal imputado, Fernando T.B., de su pareja, María José G.P, y de dos monitores, y pide penas de más de 80 años de cárcel por abusos sexuales, entre otros supuestos delitos a 61 víctimas de esta red que operaba en Gran Canaria.

En un auto hecho público, el magistrado deja fuera del procedimiento a la ex mujer del principal imputado, Edith V.P., por considerar que los hechos que se le imputan están prescritos.

Además, exime de estos hechos a un hermano de la pareja de Fernando T.B., porque señala que las supuestas relaciones sexuales que mantuvo con menores eran consentidas y esporádicas, y no había una "remarcable" diferencia de edad respecto a ellos.

El juez mantiene la libertad provisional para el monitor Juan Luis B.C., al que reclama una fianza de 400.000 euros, cuantía que eleva a seis millones de euros para el principal imputado y su novia, para quienes prorroga su situación de privación de libertad, al igual que para la otra monitora procesada, Ivonne G.H.

Según el auto, no se han modificado las circunstancias por las que se encuentran en prisión provisional.

El juez imputa para los tres procesados en prisión provisional delitos de abuso sexual con acceso carnal vía oral, anal o vaginal, sin acceso carnal, de corrupción de menores y de tenencia ilícita de armas.

Las penas que solicita, "si se aplicasen en su extensión mínima, podría llegar a sobrepasar los 80 años de prisión para la novia de Fernando T.B., ya que es a la que menos delitos se le imputan", indica en el auto.

Según el magistrado, los cuatro procesados "actuaban como una especie de estructura organizada o secta sexual en la que sus miembros aprovechaban su ascendente natural y relación de predominio y jerarquía con los alumnos menores de la escuela de kárate Torres Baena para captarlos y promover, favorecer, planear y ejecutar toda clase de contactos e intercambios sexuales".

En el auto, alude a la declaración de uno de los testigos, quien definió a los imputados como una especie de "pirámide sexual en cuya cúspide o primer nivel, como ideólogo y dirigente máximo, estaría Fernando T.B.; en un segundo nivel de ideación y ejecución, su novia, María José G.P, e Ivonne G.H.; en un tercero Juan Luis B.C., y un último nivel básico, las propias víctimas".

Añade que los testimonios de las supuestas víctimas coinciden en relatar el mismo "modus operandi" sobre Fernando T.B. y sus dos principales colaboradoras para captar a los alumnos del gimnasio, -propiedad del principal imputado- para sus "libidinosos propósitos de iniciación y adiestramiento sexual.

Así mismo, argumenta que los testigos que obran en la causa también relatan con "detalle y crudeza" cómo en el chalet de Playa de Vargas mantenían relaciones sexuales con los menores elegidos para tal fin y organizaban las relaciones sexuales de estos entre sí, de dos personas o en grupo, señala el auto.

Mostrar comentarios