La primera sesión por el juicio del caso Ausbanc ha servido al principal acusado, Luis Pineda, para reivindicar su tesis acerca de que este procedimiento no debería juzgarse porque está viciado desde el origen de la investigación, que se remonta a una denuncia anónima de la UDEF en el año 2015. Miguel Durán, letrado del empresario, ha enumerado una serie de episodios ocurridos desde entonces hasta la fecha aunque ha destacado con especial énfasis la salida del procedimiento del BBVA; un hecho que achaca a la intención de Carlos Torres de desvincularse de la gestión de su antecesor en la presidencia del banco, Francisco González.
Si las acusaciones han necesitado apenas unos minutos para exponer sus peticiones en este primer día de cuestiones previas, la defensa de Pineda ha advertido que tardaría alrededor de dos horas y media en exponer sus 17 puntos relativos a esta causa por la que el líder de Ausbanc se enfrenta a 119 años de prisión. De este modo, su letrado ha reiterado lo expuesto en el escrito presentado esta misma semana ante la Audiencia Nacional y recogido por este diario, en el que achacaba la trama a dos actores concretos: el expresidente del BBVA Francisco González y el comisario jubilado José Manuel Villarejo.
"Villarejo montó el operativo y metieron la presión necesaria al Ministerio Fiscal para que éste hiciera suya la denuncia de la UDEF y se pusiera en marcha toda la maquinaria judicial", ha expuesto el letrado en referencia la denuncia anónima presentada en la Policía Nacional contra los líderes de Ausbanc y Manos Limpias por presunta extorsión y que ellos atribuyen directamente a FG por la guerra judicial que estaba librando la asociación de consumidores en los tribunales. Igualmente se ha hecho eco del giro que protagonizó el BBVA al dejar la causa pese a haber liderado la acusación; lo que provocó que el propio tribunal le requiriera más explicaciones al respecto.
¿Por qué se retira el BBVA de la acusación particular? Pues porque la actual presidencia y cúpula de esa entidad pretenden tomar el máximo de distancia posible a lo sucedido en el anterior equipo presidido por Francisco González. La denuncia en su conjunto nos parece una sarta de calumnias y tenemos señorías que solicitar la nulidad plena de toda la prueba de cargo", ha expuesto Durán ante los magistrados de la Sección Cuarta encargados de juzgar al total de 11 personas implicadas en el caso. No obstante, no todos ellos se han sentado en el banquillo de los acusados puesto que el propio Pineda y Virginia López Negrete han recurrido a su condición de abogados para poder sentarse en la bancada de las defensas.
Rubén Sánchez ¿perjudicado?
Aunque la primera parte de esta sesión ha estado dedicada a la intervención de los abogados de Pineda, los prestigiosos letrados que se ven las caras en este juicio también se han pronunciado sobre una de las cuestiones que ha sacado a relucir el letrado de Podemos y es la relativa a que el presidente de Facua, Rubén Sánchez, pueda figurar en el procedimiento como perjudicado por la presunta organización criminal organizada por Ausbanc y Manos Limpias. "Nos parece que ha quedado meridianamente claro que ni Rubén Sánchez ni Facua pueden estar en este procedimiento. Es evidente que consiguieron el propósito estratégico para las instituciones de defensa de los consumidores que es haberles dejado el campo totalmente libre para que pudieran ejercer sus actividades sin tener que afrontar la dura competencia", dijo Durán al respecto.
Las defensas también se han opuesto a la pretensión del fiscal José Perals de incorporar seis páginas de uno de los informes de la UDEF por "extemporáneo" y también han declinado su pretensión de que declaren varios agentes de Policía implicados en la denominada 'operación Néstor' en calidad de testigos/peritos. No obstante, los letrados de Pineda sí que han vuelto a proponer al tribunal que se llame a declarar como testigos a una serie de cargos que ya solicitaron al término de la instrucción y entre los que se encuentran Francisco González, el exjefe de seguridad del BBVA Julio Corrochano, el exCeo del banco, Ángel Cano y el exjefe de seguridad Eduardo Arbizu, todos ellos imputados en el caso Villarejo.
Precisamente, en lo que respecta al procedimiento Tándem, la defensa ha hecho hincapié en que los investigadores le han permitido la personación en la pieza en calidad de perjudicado y ha reivindicado que cuando se levante el secreto de sumario de la misma, se podrá comprobar cómo existe una conexión entre el caso Ausbanc y los encargos de espionaje del comisario Villarejo. Durán ha ido más allá y ha apuntado que en uno de los ordenadores incautados al comisario jubilado se encontraría la denuncia "pseudónima" de la UDEF. "Yo creo que es blanco y en botella", ha sentenciado.
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