España va por buen camino, al menos, en lo que a la curva de contagios se refiere. El último balance de casos ha dado al Gobierno el empujón que necesitaba para iniciar la desescalada y, desde las 00:00 horas del sábado 2 de mayo, los españoles podrán romper el confinamiento... no sin restricciones. El ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha delimitado las próximas medidas de alivio: tres franjas horarias para evitar el contacto entre grupos de edades dispares. En una rueda de prensa desde Moncloa, Illa ha confirmado que el Ejecutivo ha reservado dos espacios temporales para la práctica deportiva no profesional: de las 6 hasta las 10 de la mañana, y entre las 20:00 y las 23:00 horas de la noche. Los deportistas no profesionales tampoco podrán traspasar las fronteras de sus municipios de residencia y tendrán que salir solos.
El ministro ha advertido que la orden sobre condiciones en las que se puede realizar actividad física entrará en vigor a partir de las 00.00 horas del 2 de mayo. Dentro de esta división temporal, el Gobierno ha reservado el espacio entre las 10:00 horas y las 12:00 horas de la mañana; así como la de las 19:00 y 20:00 horas de la tarde, para aquellas salidas con los ciudadanos dependientes: "Los mayores de 70 años tienen que ejercer su paseo en la franja reservada para las personas dependientes".
Los municipios pequeños, se libran del horario
En consecuencia y siempre en favor de sortear el contacto entre grupos de diferentes edades -lo que elevaría la probabilidad de contagio-, se recortará el tiempo en que los menores de 14 años podrán salir a la calle, pues, hasta ahora, podían permanecer fuera de casa desde las nueve de la mañana a nueve de la noche: a partir del sábado solo podrán pasear desde las 12 hasta las 19 horas. Además, tendrán que seguir saliendo en compañía de un adulto. A diferencia de los niños, los adultos no estarán sujetos a un límite de tiempo en su actividad física: "El límite será la distancia de no más de 1 kilómetro para paseos y el propio municipio para el deporte". En cualquier caso, el ministro ha aclarado que los detalles de las salidas se recogerán en una guía que se publicará este viernes y que recogerá las normas específicas de las nuevas medidas de alivio.
Los únicos que se 'librarán' del horario que ha marcado el Ejecutivo, serán los municipios con menos de 5.000 habitantes, que no estarán sujetos a estas franjas, ya que, según el ministro, "no hay riesgo de que haya aglomeraciones". Las actividades al aire libre en estos núcleos se podrán desarrollar desde las 6.00 hasta las 23.00, sin interrupciones. Las autoridades locales cobrarán así una nueva relevancia. Según ha explicado el socialista, "si lo consideran apropiado, los municipios podrán habilitar espacios para realizar actividades y así evitar acumulaciones".
El respaldo de los datos
El ministro ha incidido en que el incremento medio de contagios ha superado las expectativas: el objetivo de este jueves se fijó en el 1% y se ha situado en el 0,9%. El titular de Sanidad ha resuelto así una de las grandes incógnitas que abrió el plan de desescalada del Ejecutivo cuando el presidente Pedro Sánchez lo anunció este martes. Aún quedan por concretar algunos flecos, como si el Gobierno aflojará el lazo para los deportistas profesionales. Lo que es seguro es que la cautela marcará sus pasos, pues, como advertía esta mañana el director del Centro de Emergencias y Alertas Sanitarias, el doctor Fernando Simón: "Se debe evitar a toda costa un repunte aún más catastrófico que el anterior".
En la línea de la prevención, el ministro ha aprovechado para incidir en la necesidad de aprobar una cuarta prórroga del estado de alarma, más allá del próximo 10 de mayo. Desde entonces y si el Pleno del Congreso opta por no respaldar la medida, "no se podrán restringir los derechos fundamentales, como la libre circulación". Para Illa, este posible escenario implica asumir " riesgos que no merece la pena correr". Con todo, el titular de Sanidad no ha ocultado el optimismo del Ejecutivo ante los últimos datos y ha puesto el foco el el sostenimiento de los últimos días, de un mayor número de recuperados que de contagiados, sin embargo, se ha mostrado firme: "No hay que perderle el respeto al virus".
Las palabras del ministro Illa de este jueves han acotado en anuncio que la Secretaría de Estado de Comunicación ha lanzado esta mañana. "A tenor de los datos que muestran la buena evolución de la pandemia en España", Moncloa anunciaba que en 48 horas la fase 0 sería un hecho para todo el territorio nacional -a excepción de las cuatro islas que partirán con ventaja-. Y es que el balance de las últimas 24 horas había dejado 268 nuevos decesos en el país, por debajo de las 325 muertes del pasado miércoles.
Las cifras han favorecido así la inclinación del Comité técnico para la Desescalada por marcar este sábado como el día clave para iniciar la reapertura. Este órgano, que este jueves ha celebrado su primera reunión, lo componen el propio presidente Pedro Sánchez, los cuatro vicepresidentes (Carmen Calvo, Pablo Iglesias, Nadia Calviño y Teresa Ribera), los cuatro ministros autoridades delegadas (Salvador Illa, Margarita Robles, Fernando Grande-Marlaska y José Luis Ábalos), la ministra de Hacienda y portavoz (María Jesús Montero), la ministra de Trabajo (Yolanda Díaz) y el director del CCAES, Fernando Simón.
"El Gobierno no va a ciegas"
El ministro de Sanidad no ha dudado en repetir las claves del plan hacia la reapertura. Illa se ha hecho eco de las palabras de Sánchez y ha recordado que el plan cuenta con cuatro fases y que evolucionará de manera asimétrica, siempre abierto a retrocesos. "Todos los indicadores apuntan a una tendencia de control del virus", pero no hay terreno asegurado. No en vano, el socialista ha incidido en que la situación particular de cada territorio se revisará en quince días, el próximo 11 de abril, cuando las CCAA tendrán que enviar los datos correspondientes a los indicadores que Sanidad ha marcado como filtro para avanzar en la desescalada. Solo entonces se producirá el salto de la Fase 0 a la 1, "en aquellos territorios que se den las condiciones necesarias, de empezar el proceso".
Pese a la falta de certezas el ministro ha descartado que se estén tomando decisiones improvisadas: "El Gobierno no va a ciegas cuando presenta un plan porque lo ha preparado durante semanas, lo ha consultado con expertos, con las CCAA, lo ha contrastado con otros países y tiene datos sobre la incidencia de la Covid". En la sexta semana de confinamiento, los españoles vuelven a ver la luz, siempre atenuada por el temor a un posible repunte que supondría desandar el terreno que el país le ha ganado a la pandemia con sudor, lágrimas y encierro.
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