Así lo han asegurado desde el Ayuntamiento de Coín en un comunicado, en el que han indicado que en la carta remitida al agente se indica que "si no hubiera sido por él, seguramente, un gran número de habitaciones del hotel habrían sido robadas".
Los hechos sucedieron en este mes de agosto, cuando el agente de Coín disfrutaba de unos días de descanso en Dublín junto a su pareja. Una de las tardes en las que regresaban al hotel para prepararse para salir a cenar se percataron al entrar en la habitación que había alguien en el interior a oscuras.
En ese momento, según narra el agente, salió un hombre diciendo que estaba chequeando la habitación, pero la actitud le hizo sospechar ya que salió con demasiada rapidez y no tenía ninguna identificación del establecimiento.
En cuanto pidió a uno de los miembros de seguridad que lo detuviera salió corriendo y el agente de Coín lo siguió durante unos 500 metros hasta que pudo interceptarlo. Lo retuvo y se dirigió con el hasta el hotel donde enseguida se personaron varios policías irlandeses.
Tras aclarar lo ocurrido, al individuo le encontraron un teléfono móvil del que no era titular, así como heroína por valor de 300 euros que encontraron oculta en su ropa.
El agente ha explicado que no le robaron nada porque le pillaron por sorpresa, aunque sí se comprobó que había forzado la cerradura de la habitación. "Actué por instinto y salió todo bien", ha afirmado el policía, quien ha destacado "la rápida y eficaz" actuación del cuerpo de policía de Dublín.
Por su parte, el Ayuntamiento realizará un reconocimiento al agente, tal y como ha realizado la policía irlandesa, coincidiendo con la próxima celebración del patrón de la Policía Local.
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