Policía hondureño ofrece disculpas a periodista que agredió en protesta

Tegucigalpa, 29 ago.- Un policía hondureño ofreció hoy disculpas públicamente a una periodista que agredió durante una manifestación de maestros del sector público en Tegucigalpa, el 21 de marzo de 2011.

Se trata del agente Johnny Carrasco, que se disculpó con la periodista independiente Sandra Maribel Sánchez, quien cuando denunció la agresión relató que fue víctima de atropello cuando unos ocho policías disolvían con gas lacrimógeno la manifestación de los docentes.

Carrasco dijo que ofrecía disculpas a la periodista "como producto de una conciliación acordada ante los Juzgados de Letras de lo Penal, debido al atropello de que fue víctima en el marco del operativo policial" del 21 de marzo de 2011 "en inmediaciones del Instituto de Previsión del Magisterio".

"Le pido a la periodista Sandra Maribel Sánchez acepte mis disculpas esperando reparar en parte el daño ocasionado", agregó.

Sánchez hizo una nueva relación de los hechos y recordó que entre 2003 y 2012 en Honduras han sido asesinados unos 30 periodistas, sin que la mayoría de los casos hayan sido esclarecidos por las autoridades.

"Ese fue precisamente el contexto en el que se produjo la agresión de la que fui víctima el 21 de marzo del año pasado, por parte de un pelotón de policías Cobras antidisturbios, del que formaba parte Johnny Alexander Carrasco Espinoza, quien hoy vino a ofrecer disculpas por lo sucedido", subrayó Sánchez.

Las disculpas fueron ofrecidas por Carrasco en la sede del Comité para la Libre Expresión (C-Libre).

Sánchez indicó a Efe que con su denuncia, por haber sido agredida físicamente y de palabra, además de que le fue dañada una cámara, nunca pretendió hacerle daño a Carrasco, y que quienes debieron ofrecer la disculpa eran los jefes que ordenaron la operación de los policías antidisturbios conocidos como "Cobras".

Agregó que lo único que pretende es "sentar un precedente para que se respete a los periodistas en el ejercicio de su profesión".

En su mensaje en la sede de C-Libre, Sánchez indicó que el día de la manifestación de los maestros "hubo bombas lacrimógenas, balas de goma, amenazas, insultos e intimidación".

Además, hubo "un jefe, que en mi propia cara dio la orden de ataque a un grupo de unos ocho policías, a pesar de que me identifiqué como periodista, mismos que agredieron también al camarógrafo Uriel Gudiel Rodríguez, cuando filmaba lo que me estaba ocurriendo".

"Aunque quienes pretendieron arrebatarme mi cámara y llevarme detenida, siguiendo órdenes superiores ilegales e ilegítimas, fueron varios, el único acusado es el que hoy da la cara ante ustedes", subrayó.

Sánchez recordó que fue agredida porque registró con su cámara "el momento en que ese mismo grupo de policías lanzaba bombas lacrimógenas al interior de un autobús del transporte urbano, lleno de personas, incluyendo niños".

"Al final lograron su objetivo, porque al intentar proteger ese material gráfico y salvar mi herramienta de trabajo, la lancé a una persona que intentaba auxiliarme, con tan mala suerte que se destruyó al impactar en el pavimento", dijo Sánchez.