El avance de la investigación por los encargos que hizo BBVA a José Manuel Villarejo ha llevado al magistrado que investiga esta macrocausa penal, Manuel García Castellón, a rectificar y admitir ahora la personación como perjudicados de dos exdirectivos de Ausbanc. Lo ha hecho tras incorporar a esta pieza novena del caso Tándem un nuevo oficio de la Policía Judicial que vendría a dar cuenta del hallazgo del tráfico de comunicaciones de un número de teléfono asociado a Ausbanc Empresas.
Es por ello que, en sendos autos recogidos por este diario, da luz verde para que figuren como perjudicados Luis María Suárez (director de publicaciones de la asociación) y Alfonso Solé Gil (tesorero). Y ello pese a que hace apenas un mes denegó esta pretensión de los dos altos cargos de Ausbanc al considerar que los seguimientos que se produjeron desde el entramado empresarial de Villarejo solamente afectaron a la figura de Luis Pineda y su entorno más cercano. De hecho, el sumario de esta parte concreta del procedimiento cuenta con informes que recogen la existencia de un operativo que habría llevado a cabo Villarejo para el BBVA contra el presidente de Ausbanc y que se bautizó con el nombre de 'Proyecto Pin'.
Las nuevas pesquisas aportadas al Juzgado Central de Instrucción número 6 por la Policía Judicial este pasado mes de enero acreditarían la existencia de un control de tráfico de comunicaciones y otros datos asociados a un número de teléfono vinculado con Ausbanc. Por ese motivo, el magistrado estima el recurso presentado por Suárez y Solé Gil contra su auto de enero y dice ahora que resultarían "directamente perjudicados" por los hechos que se investigan en esta pieza novena y que gira en torno a los encargos que durante 13 años (2005-2017) efectuó BBVA a Villarejo por un total de 10,28 millones de euros.
Respaldo de Anticorrupción
El magistrado, que adopta esta decisión con el criterio favorable de la Fiscalía Anticorrupción, ya permitió la personación en la causa de Pineda el pasado año tras reclamarlo hasta en tres ocasiones. Su defensa considera que el empresario, que está siendo juzgado por presunta extorsión por la Audiencia Nacional, fue víctima de la entidad y de su entonces presidente, Francisco González, toda vez que le espiaron e hicieron seguimientos en el marco de la lucha judicial que la asociación de consumidores tenía abierta con la entidad por el asunto de las cláusulas suelo. Francisco González, por su parte, apuntó en su declaración en la Audiencia Nacional como investigado que se encomendó esta misión a Villarejo porque desde la entidad les estaban chantajeando.
Sea como fuere, el estallido del caso Tándem en noviembre de 2017 provocó la detención del comisario jubilado y el registro en sus domicilios en los que los agentes de la Policía encontraron material relacionado con los seguimientos a Ausbanc y su líder. En concreto, y de acuerdo con un informe de la Unidad de Asuntos Internos, se recopilaron en tres CDs todos los archivos incautados al policía encubierto a petición del entonces magistrado instructor Diego de Egea, el cual expuso que este encargo concreto "habría tenido por objeto que Villarejo espiara a Luis Pineda a cambio de recibir del BBVA unos 500.000 euros anuales durante varios semestres mientras Villarejo era funcionario policial en activo".
Entre los documentos requisados por los agentes se incluyen correos electrónicos intercambiados entre el abogado y socio de Villarejo, Rafael Redondo, y el que fuera máximo responsable de seguridad de la entidad, Julio Corrochano. Destaca uno de 2013 el cual, bajo el asunto 'Ausbanc entra en barrena', da cuenta del vehículo utilizado por 'Pin' para sus desplazamientos. También encontraron material en formato Excel sobre todas las llamadas mantenidas desde dos teléfonos vinculados al grupo empresarial de la asociación de consumidores y todo ello años antes de que se interpusiera una denuncia anónima contra los líderes de Ausbanc y Manos Limpias por presunta extorsión.
Se reanuda el juicio por Ausbanc
La misma, que según los acusados fue urdida por BBVA y Villarejo, dio origen a la bautizada como 'operación Nestor' por la cual se detuvo a Pineda y Miguel Bernad. Más de tres años después de aquellos hechos, la Sección Cuarta de la Sala de lo Penal acoge el juicio contra todos los acusados de esta presunta red de extorsión la cual habría consistido en intentar captar fondos de empresas y otros entes bajo la amenaza de publicar información falsa contra ellos en los medios. La vista, que se aplazó en varias ocasiones hasta el pasado mes de febrero, arrancó con la petición de los acusados de suspender el juicio a la espera de conocer el sumario de esta pieza del caso Villarejo, el cual estaba entonces bajo secreto de sumario.
El banco, por su parte, se retiró del procedimiento a mediados del pasado año pese a haber liderado la acusación contra Manos Limpias y Ausbanc. Lo hizo para evitar ruido mediático tras el estallido del escándalo de los audios del comisario jubilado. El interrogatorio practicado a Francisco González, el cual se prestó a responder al magistrado y la Fiscalía Anticorrupción, pone de manifiesto cómo el entonces presidente dijo que a finales de la década de los noventa "comenzó un acoso brutal al banco". También relató que para que se investigaran estos hechos se les recomendó que presentaran una denuncia de manera anónima para no exponer al banco. Con todo, el fiscal del caso Ausbanc, José Perals, no considera que estos hechos afecten al juicio, el cual se reanuda este próximo viernes día 6 para continuar con la declaración de Pineda.
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