Polonia espera contar con más presencia de la OTAN ante la guerra en Ucrania

Nacho Temiño

Varsovia, 31 ago.- El Gobierno polaco espera que la próxima cumbre de la OTAN refuerce la presencia de la Alianza en Polonia, un país que se siente inseguro ante el recrudecimiento del conflicto de Ucrania y que aspira ahora a contar con una base aliada estable, algo que irritaría profundamente a Moscú.

Varsovia lleva meses trasladando a sus aliados la necesidad de "reforzar el flanco Este de la OTAN", como expuso su ministro de Asuntos Exteriores, Radoslaw Sikorski, en una reciente entrevista a Efe.

La esperada respuesta de la Alianza debería llegar en la cumbre de Newport (Gales), los próximos 4 y 5 de septiembre, donde Varsovia confía en que al menos se decida crear un centro logístico para Polonia y las repúblicas Bálticas, según avanzó días atrás el responsable del Centro Nacional de Seguridad polaco, el general Stanislaw Koziej.

De adoptarse, la decisión de crear una base permanente en Polonia necesitará tiempo hasta materializarse, aunque Varsovia cree que es un paso necesario para "equilibrar la presencia de la OTAN en Europa".

"España, Italia, Reino Unido y Alemania cuentan con importantes bases de la OTAN y están militarmente seguros", mientras que en Polonia (miembro de la Alianza desde hace 15 años) la presencia es simbólica, señaló a Efe el jefe de la diplomacia polaca.

El secretario general de la Alianza, Anders Fogh Rasmussen, evita por ahora hablar de "base estable" y apunta a un sistema de rotación de tropas aliadas, que se llevaría a cabo con una "frecuencia muy alta" para que "cualquier agresor potencial" sea consciente de que un ataque contra un país miembro le enfrentará al conjunto.

Más allá de la decisión que se adopte en Newport, Sikorski no esconde su aspiración de que Polonia llegue a contar con dos brigadas estables en su territorio, lo que, a su juicio, se justifica ahora más que nunca con la delicada situación geopolítica de la región y la invasión rusa que ha denunciado Kiev.

El presidente polaco, Bronislaw Komorowski, aprovechó la reciente celebración del Día de las Fuerzas Armadas para sumarse a esta demanda de una mayor presencia de la OTAN.

"La libertad no es algo que se consigue y se mantiene por si sola, también tiene que ser apreciada, protegida y fortalecida", afirmó.

Pero esas dos brigadas ansiadas por Sikorski tendrán que esperar; por ahora la presencia aliada es muy reducida y se limita a algunos centenares de militares y varios cazas.

Washington ya ha anunciado que 600 soldados de Caballería con sede en Texas serán la siguiente unidad que viajará a Polonia, mientras que recientemente Reino Unido se comprometió a enviar unos 1.300 uniformados para participar en ejercicios militares en la zona, a los que previsiblemente se unirán 200 canadienses.

Mientras, Varsovia se esfuerza en hacer ver a sus aliados la importancia de que "tomen en serio" la inestabilidad en la región y se comprometan a reforzar la presencia de la OTAN en la zona.

Recuerda además el incuestionable compromiso con la Alianza de Polonia, que apoyó activamente a EEUU en los últimos conflictos de Irak y Afganistán, y el creciente gasto militar del país.

"No puede ser que nuestro poderoso vecino del este (Rusia) haya aumentado su presupuesto de Defensa en los últimos ocho años mientras la OTAN lo ha estado recortando," ha dicho el presidente polaco, quien pide más aporte financiero de los miembros de la Alianza.

Más presencia de la OTAN en los países excomunistas, en su flanco oriental, tradicional zona de influencia de Rusia, enfurecerá previsiblemente al Kremlin y elevará la tensión en la región.

"La OTAN está para garantizar la seguridad de sus miembros, no para hacer felices a países que no pertenecen a la Organización", sentencia Sikorski.