Lisboa, 11 dic.- El Gobierno luso quiere ampliar el contrato lácteo europeo, que regula la relación entre productores y transformadores y será obligatorio en Portugal desde abril, a otros sectores ganaderos, como el porcino, para mejorar sus condiciones.
Así lo ha expresado hoy, en declaraciones a los periodistas, el secretario de estado de Agricultura luso, José Diogo Albuquerque, quien además adelantó que el Ejecutivo portugués estudia incluir la distribución de la leche en la redacción de esa normativa que se aplicará el próximo año.
La ampliación de la cadena hasta los distribuidores será no obstante consultada con plataformas profesionales, explicó.
La intención del gobierno luso es que todos los sectores agroalimentarios terminen por contar con los contratos entre productores y transformadores para dar seguridad a los ganaderos y regular variables como el precio y composición de los productos, las partes implicadas y la duración del acuerdo.
Albuquerque ha señalado que en ese modelo de contrato deberían estar todos los sectores agroalimentarios.
"No entiendo como es posible que los contratos escritos no sean obligatorios" ha declarado.
La creación de esos contratos esta incluida en la normativa aprobada por la Unión Europea (UE) para reforzar a los productores de leche en las negociaciones de su producto, de cara a la finalización del sistema de cuotas en 2015.
Los contratos, cuya aplicación es opcional para los socios comunitarios, aspira también a promover una mayor transparencia en la formación de precios en el sector agroalimentario.
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