Presidente de banco y exministro declaran por quiebra de aerolínea uruguaya

  • El presidente del principal banco estatal de Uruguay y un exministro de Economía comparecieron hoy ante un juzgado para declarar por un supuesto delito de abuso de funciones en la liquidación de la aerolínea de bandera, Pluna.

Montevideo, 4 abr.- El presidente del principal banco estatal de Uruguay y un exministro de Economía comparecieron hoy ante un juzgado para declarar por un supuesto delito de abuso de funciones en la liquidación de la aerolínea de bandera, Pluna.

El presidente del Banco de la República Oriental del Uruguay (BROU), Fernando Calloia, y el exministro Fernando Lorenzo (2010-2013) llegaron por separado al Juzgado Penal de Crimen Organizado de Segundo Turno, a cargo de la magistrada Adriana de los Santos.

Es la segunda vez que Calloia y Lorenzo declaran por este caso y fuentes cercanas a los investigados han señalado a los medios que la jueza podría resolver hoy su suerte en la causa.

"Espero confiado y tranquilo la decisión judicial", afirmó escuetamente Lorenzo, que dimitió de su cargo en diciembre pasado, al llegar al juzgado.

Lorenzo renunció cuando fueron detenidos el argentino Marias Campiani, exgerente de Pluna, y los empresarios Sebastián Hirsch y Arturo Álvarez Demalde, procesados después con prisión preventiva por la quiebra de Pluna a mediados de 2012.

Lorenzo y Calloia consiguieron retrasar la decisión judicial sobre su participación en aquel proceso con un recurso de inconstitucionalidad, pero la Suprema Corte de Justicia lo rechazó en febrero pasado.

El caso Pluna sigue varias líneas de investigación, una de las cuales es impulsada por la oposición para dilucidar cómo pudo ser "vaciada" la aerolínea durante la gestión de Campiani, que "dejó un pasivo" de 301,5 millones de dólares y un activo de 290 millones.

Otra investigación, iniciada de oficio por el fiscal Gómez, se centra en la frustrada subasta de los aviones de Pluna como parte de su proceso de liquidación y en un aval millonario que otorgó el BROU a una desconocida empresa supuestamente española, Cosmo, para adquirir las aeronaves en una rocambolesca operación que no fructificó.

La tercera pesquisa atañe a la denuncia que presentó la empresa estatal de combustibles Ancap contra la directiva de Pluna durante la gestión de Campiani por el pago de combustible con cheques sin fondos.

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