Los privilegios de los diputados: sueldos desorbitados por trabajar 17 días

La Legislatura más breve de la historia de la Democracia en España está por llegar a su fin. El balance de esta etapa institucional quedará en el recuerdo como sinónimo de ridiculez, incapacidad y el más bajo nivel oratorio que se recuerde en el Congreso.

Pero además, en el inventario de estos escasos meses sin ideas ni capacidad de diálogo de nuestros parlamentarios, ellos han dejado un particular sello. Éste ha sido el período en el que los diputados han trabajado menos y han cobrado sueldos elevados. Además han disfrutado un sinfín de privilegios que incluyen viajes internacionales, Iphones, 'kits tecnológicos' y otros beneficios.

La senadora Arenales Serrano (PP) ha evidenciado la situación hace escasos días sin pudor alguno: llegó reconocer que en estos cuatro meses de Legislatura apenas trabajó 17 días: "Cinco plenos de dos días cada uno; algún acto que me han invitado sobre terrorismo, medio ambiente… y fui a colocar el despacho y ahora a quitarlo", ha declarado, según recogen medios como Periodista Digital.

Haciendo un breve repaso a la situación de esta XI Legislatura que tendrá su punto final el próximo 26-J, podemos comenzar observando los sueldos que cobran los parlamentarios. Sus salarios vienen fijados por el acuerdo de la Mesa del Congreso de 1 de junio de 2010, por el cual las retribuciones se redujeron un 10% y están congeladas desde dicha fecha. Pero no son nada despreciables, más teniendo en cuenta el pésimo nivel político que han mostrado en lo que va de este año. 

Un diputado de Madrid cobra 3.683 euros de salario. Uno de fuera de la Comunidad percibe 4.683 euros. La asignación básica de cada diputado es de 2.813 euros brutos al mes, a la que hay que sumarle la dieta de 870 euros mensuales para los electos por Madrid y de 1.823 euros para el resto. Además, quienes ostenten cargos en la Mesa del Congreso y en las Comisiones de esta cámara cobrarán complementos salariales de hasta 3.327 euros.

Pero esto solo es el comienzo: los portavoces de cada grupo parlamentario, los presidentes de las comisiones y los miembros de la Mesa del Congreso siguen teniendo a su disposición coches oficiales. El resto de diputados disponen de la famosa y polémica tarjeta para sus desplazamientos en taxi por Madrid, con un límite de 3.000 euros anuales, que pagamos todos los ciudadanos con nuestros impuestos. No han prescindido de ellos ni siquiera los parlamentarios que habían prometido hacerlo.Viajes al exterior y viáticos

En poco más de 90 días, esta Legislatura se ha saldado con ¡27 salidas al extranjero de nuestros diputados! y senadores (hasta la fecha). Entre los destinos más insólitos que han realizado los parlamentarios destacan Zambia y Mongolia. Hasta allí se desplazó la parlamentaria Gloria Elizo (Podemos) a una 'cumbre' de dos días de la Asociación Parlamentaria Asia Europa.

También aparecen como destinos Nueva York y Tokio. Este ha sido el lugar 'más lejano' de esta Legislatura, al que ha viajado una delegación de siete diputados, encabezados por la secretaria primera del Congreso, Alicia Sánchez Camacho (PP), para asistir entre el 12 y el 13 de abril pasados a una reunión de la Red Parlamentaria Global de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico.

Por ahora, las Cámaras sólo han dado a conocer el coste de cuatro viajes. Esos periplos han supuesto 102.211,16 euros a las arcas del Estado, dado que el resto aún está pendiente de facturación, según los datos recogidos por Europa Press.

Cada uno de esos diputados que ha viajado en misión oficial al extranjero ha recibido 150 euros diarios en concepto de dietas. Los que lo han hecho en el ámbito nacional han percibido 120 euros al día. Además, todos los diputados han contado con el denominado 'kit tecnológico', que incluye una tableta. Este sistema se ha puesto en práctica por primera vez desde la pasada legislatura.

Por otra parte, cada parlamentario cuenta con móviles de última generación que a ellos no les cuestan ni un euro (el modelo es Iphone), ordenador en su escaño, en su despacho y una línea ADSL en su domicilio. Todo gratis. 

Hay otras ventajas: el Congreso paga además los gastos de transporte de los parlamentarios abonando directamente el precio del billete a la empresa transportista. La otra opción es que los diputados utilicen su propio vehículo. En ese caso reciben 0,25 euros por cada kilómetro que realicen, siempre que "el desplazamiento esté debidamente justificado".

Del 'otro lado' queda la imagen paupérrima de una Legislatura con varios shows incluidos en el Congreso, márketing, eslóganes, peleas, y muchísimo ruido y pocas nueces. En definitiva, jornadas de debates para el olvido... que resultarán imposibles de olvidar.