La revolución pendiente del ataque de Inglaterra

Roy Hodgson había decidido cambiar radicalmente su ataque para el partido del lunes ante Eslovaquia, pero sus planes no surtieron el efecto esperado: Inglaterra no encontró el camino del gol, sólo pudo empatar 0-0 y se clasificó a octavos, pero dejándose en el camino el liderato y teniendo que conformarse con ser segunda del grupo B.

Jamie Vardy y Daniel Sturridge fueron esta vez titulares. Ante Gales en la segunda jornada habían empezado en el banquillo de los suplentes y habían entrado en juego después, logrando los tantos de la victoria (2-1).

El debate estaba más que abierto, sobre todo ante la falta de inspiración de Harry Kane, máximo anotador de la Premier League recién terminada con 25 tantos, pero sin gran acierto con el equipo de los Tres Leones en los dos primeros partidos de esta cita continental, ese ante Gales y el anterior contra Rusia (1-1).

Vardy, con 24 tantos en la última Premier y estrella del Leicester campeón, y Sturridge, cómplice en el Liverpool de otro hombre importante de la selección inglesa como Adam Lallana, parecían ante una gran oportunidad ante Eslovaquia, una selección debutante en el torneo. No hubo suerte y no encontraron espacios ante un rival muy organizado y con un arquero en una de sus mejores noches, Matus Kozacik, elegido el mejor del partido.

Hodgson no ocultó después del partido su decepción por no haber logrado marcar, pero lanzó un mensaje optimista: los goles llegarán en los próximos partidos, no tiene dudas de ello.

"En un torneo así te puedes clasificar con un resultado como el de hoy. Igual nos critican por dominar y no poder marcar. Pero llegará el día en el que marquemos las ocasiones que tenemos, los goles llegarán. En los próximos partidos hay que estar seguros de que no sólo hacemos ocasiones, sino que también las convertimos", declaró en la conferencia de prensa posterior al partido.

"Cuando hice el doble cambio ante Gales con Vardy y Sturridge marcamos goles y la gente dijo que eran buenos cambios. Ahora que comencé con ellos y no marcamos, puede que la gente diga que no era lo correcto", apuntó.

Vardy y Sturridge tuvieron buenas oportunidades en la primera parte, pero sin acierto. Junto a ellos, Adam Lallana, también activo, pero sin fortuna.

En la segunda parte, Hodgson fue dando entrada a pesos pesados que habían empezado como suplentes, a Wayne Rooney y Dele Alli hacia la hora de juego, y finalmente a Harry Kane para el último cuarto de hora, pero sin conseguir el revulsivo esperado. Raheem Sterling, la otra baza, se quedó esta vez sin jugar.

Tres goles marcados en tres partidos en esta Eurocopa, pero sobre todo la sensación de que el equipo no consigue exprimir al máximo su velocidad ni el alto número de ocasiones que es capaz de generar.

"Como en los partidos anteriores nos hemos encontrado con un arquero que tuvo su día. Hemos dominado en todas las partes del campo", estimó el arquero Joe Hart, que reconoció que era "frustrante" no poder marcar tras un partido con tantas oportunidades.

El seleccionador de Eslovaquia, Jan Kozak, dijo tras el partido que la elección de Vardy y Sturridge era "lógica" y subrayó lo fuerte que es Inglaterra en ataque, para destacar los méritos de los suyos al terminar con su arco imbatido.

En la concentración del equipo en Chantilly, en las afueras de París, Hodgson tendrá ahora que decidir qué ataque poner para el duelo de octavos de final, el lunes en Niza.

El debate está lejos de haber quedado cerrado.

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