Rubalcaba quiere más visibilidad y deja a Valenciano el día a día del PSOE

  • El secretario general de los socialistas, Alfredo Pérez Rubalcaba, quiere que su persona y el partido tengan más visibilidad y, para ello, se centrará en su papel de líder de la oposición, lo que le obliga a dejar el día a día del partido en manos de la vicesecretaria general, Elena Valenciano.

Madrid, 21 mar.- El secretario general de los socialistas, Alfredo Pérez Rubalcaba, quiere que su persona y el partido tengan más visibilidad y, para ello, se centrará en su papel de líder de la oposición, lo que le obliga a dejar el día a día del partido en manos de la vicesecretaria general, Elena Valenciano.

"Cuando uno está en todo acaba desgraciadamente no estando en algunas cosas", ha dicho Rubalcaba en la rueda de prensa posterior a la reunión de la Ejecutiva Federal, la primera después de las crisis con el PSC, con el PSdeG y de la moción de censura de Ponferrada (León).

la distribución de papeles es uno de los principales cambios que ha introducido para mejorar el funcionamiento interno y para ser más eficaces como oposición, después de las "errores" de los últimos tiempos, uno de ellos "gravísimo", como fue el de Ponferrada, con el apoyo de un condenado por acoso sexual.

La Ejecutiva de esta tarde también ha dado el visto bueno a las bases para el diálogo entre PSOE y PSC con la vista puesta en un nuevo protocolo de relaciones entre ambos partidos, que, según ha explicado Rubalcaba, buscará la "simetría" en la participación que la dirección de cada uno tenga en la del otro.

Para que casos como el de Ponferrada no vuelvan a repetirse el PSOE ha acordado reforzar la estructura de igualdad de todo el partido y de los grupos en el Congreso y en el Senado.

También ha creado una comisión de garantías de igualdad, que presidirá la consejera de Estado Amelia Valcárcel y de la que formarán parte ex ministros como Carmen Alborch, Rosa Conde, Ángel Gabilondo y Antonio Camacho, así como las históricas dirigentes Francisca Sauquillo y Amparo Rubiales y la representante de Juventudes Socialistas Mireia Ruiz.

Los cambios contemplan la inclusión de los diputados César Luena y Carmen Montón en la dirección del grupo en el Congreso y de María Chivite en el Senado y la vuelta a la Ejecutiva de Ramón Jáuregui como delegado federal para la conferencia política, de modo que cuando ésta se celebre en octubre dejará ese puesto.

Quien no piensa abandonar es Rubalcaba, quien ha insistido ante los medios en que continuará de secretario general hasta que se agote su mandato, en 2016: "Yo tengo un contrato que tiene un tiempo y un contenido; el tiempo son cuatro años y el contenido es un proyecto, cambiar el PSOE para que vuelva a ser el PSOE", ha anotado.

Hasta entonces, se ha propuesto aumentar su presencia en la sociedad como líder de la oposición y su agenda social e internacional, mientras que Valenciano se centrará en coordinar el día a día del partido.

"Cada uno haremos nuestro trabajo y lo haremos mejor", ha zanjado, convencido de que la delimitación de funciones les hará más eficaces y permitirá responder a un clamor de la militancia, que el partido y su líder tengan más presencia en la sociedad.

Valenciano se concentrará más en el trabajo interno del partido, coordinará la Ejecutiva y las relaciones de ésta con los grupos parlamentarios.

Rubalcaba ha querido dejar claro también su apoyo a la portavoz en el Congreso, Soraya Rodríguez, porque lo está haciendo "muy bien", en un momento en el que algunos diputados socialistas han expresado sus discrepancias con su trabajo al frente del grupo.

El secretario de Organización, Óscar López, que verá mermadas sus competencias con estos cambios, se centrará en "organizar" -ha precisado Rubalcaba- y en impulsar el proyecto "Hacer PSOE 2015", con el que los socialistas quieren, entre otras cosas, ampliar su base social.

Respecto a las relaciones con el PSC, Rubalcaba ha explicado que la simetría no tiene por qué ser orgánica, pero debe servir para que, del mismo modo que el PSC toma posiciones en las cuestiones que decide el PSOE, la organización federal no esté "ajena" a lo que decida la catalana.

"Simetría, reciprocidad y autonomía". Tres palabras que deberán presidir, a su juicio, la relación entre ambos partidos, que ya subrayan como principal objetivo compartido la reforma constitucional para "federalizar" España será el objetivo compartido.

El primero de los cuatro elementos del documento acordado es, según ha explicado el líder socialista, que PSOE y PSC sigan juntos: "No queremos romper, al contrario, queremos reforzar" la relación, ha dicho.

También ha explicado que ambos partidos son "conscientes" de que les "separa" el "derecho a decidir" y por eso quieren ir al "fondo de la cuestión", la relación entre España y Cataluña, que es necesario "revisar".

Alfredo Pérez Rubalcaba se ha mostrado convencido de que PSOE y PSC van a encontrar una "solución" a las "dificultades" de las últimas semanas y por eso trabajarán para concluir un proyecto "compartido" para una España que "por supuesto incluye a Cataluña".

Como gesto de su disposición al diálogo con el PSC, Rubalcaba ha explicado que dejará vacante el cargo de secretario general adjunto del grupo socialista que dejó José Zaragoza cuando dimitió después de que los diputados catalanes rompieran la disciplina de voto en un debate en el Congreso apoyando el derecho a decidir -a excepción de Carme Chacón, que se abstuvo-

Rubalcaba espera que cuando el PSOE llegue a un acuerdo con el PSC sea de nuevo un diputado catalán el que ocupe esa vacante dentro del grupo.EFE

ess-lr-pamp/fv

Mostrar comentarios