Primera sesión de control al Gobierno tras el 14-F

Sánchez pasa del "sentido de Estado" de Vox a pedir al PP que rompa con Abascal

El presidente afirmó hace dos semanas que el partido verde tuvo "responsabilidad de país" al salvar el decreto de los fondos europeos a solicitar, tras las catalanas, a Casado y Arrimadas que se desmarquen.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez interviene durante una sesión de control al Gobierno, en Madrid (España), a 16 de diciembre de 2020. Durante el pleno, el presidente del Gobierno ha hecho un primer balance del segundo estado de alarma decretado el pasado 9 de noviembre para hacer frente a la segunda ola de la pandemia del coronavirus. Además, el presidente también ha informado de las últimas tres reuniones del Consejo Europeo, en los que los jefes del Estado y de Gobierno de la UE debatieron también sobre cómo mejorar la lucha contra la pandemia. E. Parra. POOL / Europa Press (Foto de ARCHIVO) 16/12/2020
Sánchez pasa del "sentido de Estado" de Vox a pedir al PP que rompa con Abascal
Europa Press

De afirmar que Vox tuvo "sentido de Estado" y "responsabilidad de país" al salvar el decreto de los fondos europeos a pedir a PP y Ciudadanos que "rompan con la ultraderecha" en Madrid, Andalucía, Castilla y León o Murcia, así como en los ayuntamientos. Esta ha sido la evolución de Pedro Sánchez en apenas dos semanas, entre sesión de control preelecciones catalanas y pleno en el Congreso tras el 14-F. El presidente del Gobierno ha tenido la mano a Pablo Casado para que los populares se sumen a un pacto de Estado para renovar el CGPJ, el Tribunal Constitucional, RTVE y otros órganos constitucionales. Ahora, sin elecciones a la vista, es el momento, consideran en Moncloa.

Ha sido una sesión de guante blanco, diferente a la primera de este mes de febrero previa a los comicios catalanes. Los resultados electorales han calmado los ánimos. Casado e Inés Arrimadas han centrado sus preguntas en atacar al Gobierno vía Unidas Podemos y Sánchez lo ha aprovechado para pedir que rompan con "la ultraderecha" tras su resultado en Cataluña. Al PP, incluso, le ha solicitado que deje a un lado "su complejo" con el partido presidido por Santiago Abascal que, ha dicho, "les están comiendo".

Casado ha respondido a Sánchez que "menos lobos" y que cuando el PSOE se estrelló en Galicia y cuando fue sorpassado por Podemos en varios territorios él no depuró responsabilidades en el PSOE. El presidente del PP ha avisado que al Gobierno le van a imponer "ajustes" y le ha pedido que ponga orden en el "camarote de los hermanos Marx" y en la "jaula de grillos de Moncloa".

Arrimadas, por su parte, también ha reprochado a Sánchez la actitud de su vicepresidente segundo Pablo Iglesias cuestionando la "democracia plena" en España y el "señalamiento" a periodistas y a jueces. El jefe del Ejecutivo le ha respondido con una defensa del Partido Comunista que, según ha dicho, reconcilió e hizo posible la democracia. "Rompan los pactos territoriales con Vox", le ha reclamado al partido naranja.

El momento más caldeado de la sesión ha sido el enfrentamiento dialéctico entre Iglesias y el secretario general del PP, Teodoro García Egea. El número dos de Casado ha repasado los problemas judiciales que afectan a dirigentes de Unidas Podemos y ha afirmado, entre aplausos de su bancada, que Sánchez "miente" por tener en el Gobierno a Iglesias. El vicepresidente segundo ha respondido que entiende "que se cambien de sede, pero que dejen de robar". "Van a hacerlo tiempo y mientras seguiremos gobernando", ha concluido.

El nuevo Govern en Cataluña

Sánchez también se ha manifestado por primera vez sobre el nuevo Govern. Lo ha hecho en un intercambio con Miriam Nogueras, sustituta de Laura Borràs como portavoz de JxCAT en el Congreso. El presidente ha defendido un Ejecutivo "de izquierdas" porque cree que es lo que han demandado los catalanes el pasado domingo y, por tanto, no tiene cabida en él el partido de Carles Puigdemont, a quien ha lamentado que disponga de dirigentes que comparten con Vox odio y xenofobia.

Sánchez ha afirmado que "se abre paso una demanda poderosa en la sociedad catalana de reencuentro y no de confrontación como ustedes vienen alimentando durante demasiados años". También ha repetido que existe un "conflicto" entre dos partes de la sociedad catalana y ha reiterado por ello la necesidad de ese reencuentro y diálogo dentro de la legalidad democrática.

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