El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha convocado un Consejo de Ministros extraordinario a primera hora de este viernes para comunicar a su gabinete la decisión final que va a tomar sobre un posible adelanto de las elecciones, tras no haber podido sacar adelante sus Presupuestos en el Congreso esta semana. Después de esa reunión, el presidente realizará una declaración institucional ante los medios de comunicación para dejar clara su postura y anunciar, si se confirma, la fecha en la que podrían celebrarse los próximos comicios.
Una vez resuelto el trámite sobre las próximas elecciones, el presidente convocará a las 10.30 horas de la mañana al Consejo de Ministros ordinario de cada viernes, en el que está previsto que se tomen una serie de decisiones relativas al área de educación y sobre la exhumación de los restos de Franco, entre otras cosas.
Tanto la opinión pública como una gran parte de las fuerzas políticas dan por sentado que habrá un adelanto electoral, sobre el que solo queda marcar la fecha concreta en la que se celebrarán. La propia ministra de Hacienda, María Jesús Montero, aseguraba este jueves en una emisora de radio que la decisión de adelantar las elecciones estaba sobre la mesa, con la única duda del día en que se harán. Incluso el ministro de Ciencia y Universidades, Pedro Duque, daba por hecho el adelante en la televisión pública este jueves por la tarde.
Todas las quinielas apuntan al 28 de abril como fecha más probable para los comicios, una vez pasada la Semana Santa y con el tiempo suficiente como para poner en marcha alguna de las medidas más urgentes que había anunciado y que desde el actual Ejecutivo se consideran imprescindibles. Si bien desde las fuerzas políticas de la oposición (sobre todo PP y Ciudadanos) se advierte que no se deben tomar en este periodo de tiempo preelectoral decisiones de amplio calado o de gran alcance, desde el entorno del Gobierno no se descarta cumplir con algunas reformas en el ámbito laboral que completen parte de lo que se ha anunciado en los ocho meses de mandato de Sánchez.
La idea primordial de Pedro Sánchez hasta esta semana era agotar al máximo la legislatura y esperar incluso a 2020 para convocar elecciones, pero la debacle sufrida este miércoles en el Congreso, con las enmiendas a la totalidad que han echado para atrás sus presupuestos, han dejado muy tocado al Ejecutivo y han lanzado todas las alertas sobre el adelanto electoral, una incógnita que mañana quedará definitivamente resuelta.
Una vez sin Presupuestos y descartada la opción de poner en marcha su programa de subida fiscal, transición ecológica, cambios en la reforma laboral y otras medidas que conllevan un aumento del gasto público en más de 6.000 millones de euros, desde las filas socialistas se ha advertido que "cada día que pase sin poder hacer lo que queremos, es perder".
El problema surge al tener que afrontar unos aumentos del gasto millonarios sin poder subir los impuestos para sufragar su coste, algo que cercena en gran medida las opciones de cualquier Gobierno. La convocatoria electoral había sido además muy demandada por los partidos de la oposición, que critican sobre todo el hecho de que Sánchez haya apoyado su Gobierno en las fuerzas independentistas catalanas que apoyaron su moción de censura (junto a Podemos), y que son las que ahora le han fallado a la hora de sacar adelante los Presupuestos.
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