El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y su homólogo portugués, António Costa, encabezarán este jueves en Trujillo la 32 cumbre bilateral. La reunión llega en un momento crítico para el mandatario luso, ya que se celebra el día después del rechazo al proyecto presupuestario del Ejecutivo. Nueve ministros españoles y sus correspondientes homólogos portugueses acompañarán a Sánchez y Costa en esta cumbre en la que se va a suscribir un nuevo Tratado de Amistad y Cooperación entre los dos países que actualizará el vigente hasta ahora.
El primer ministro portugués viaja a la localidad extremeña de Trujillo después de que el Parlamento luso rechazase este miércoles el proyecto de presupuestos para 2022. Un rechazo que abre la puerta a elecciones anticipadas ya que el presidente de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa, había avanzado que convocaría nuevos comicios si finalmente el Gobierno no sacaba adelante su proyecto de cuentas del Estado.
De hecho, Rebelo de Sousa ha comenzado ya una ronda de contactos para preparar ese adelanto electoral y ha recibido a Costa y al presidente del Parlamento, Eduardo Ferro Rodrigues. Por su parte, Sánchez presidirá una delegación de la que formarán parte la vicepresidenta primera, Nadia Calviño, y la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, principales protagonistas del enfrentamiento entre los socios de coalición a cuenta de la negociación de la reforma laboral y a las que se verá por vez primera juntas públicamente desde que comenzó esta polémica.
Junto a ellas estarán la vicepresidenta tercera, Teresa Ribera, y los ministros de Asuntos Exteriores, Interior, Transporte, Industria, Agricultura y Cultura. La cumbre se desarrollará bajo el lema "Por una movilidad sostenible" y en ella se firmarán un total de nueve acuerdos, el más relevante de ellos el que actualizará el Tratado de Amistad que suscribieron en 1977 los entonces presidentes de Gobierno de ambos países, Adolfo Suárez y Mario Soares.
El objetivo es renovarlo y adaptarlo a la nueva realidad tras más de cuarenta años de vigencia en los que los dos países han sufrido profundos cambios y han pasado desde entonces a formar parte de la Unión Europea. En ese contexto, un asunto destacado de la reunión será avanzar en proyectos conjuntos que se puedan desarrollar gracias a los fondos europeos acordados para facilitar la recuperación tras la pandemia de coronavirus.
La movilidad sostenible, la digitalización y la transición ecológica están en la base de algunos de esos planes conjuntos. La pesca y la caza en el tramo internacional del río Miño, la colaboración en materia digital, de infraestructuras viarias y de archivos, el reconocimiento del Estatuto del Trabajador Transfronterizo y la conservación del puente internacional del Miño son otros asuntos incluidos en los acuerdos que se suscribirán.
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