"No estoy en condición de anticipar nada". Las palabras del ministro de Sanidad, Salvador Illa, han confirmado que la fase 3 abre un período donde el 52% del país pisará terreno pantanoso. "Los presidentes de las CCAA en fase 3 pueden decidir cuándo acabar con este escenario para entrar en el de nueva normalidad", ha explicado el titular de la cartera. Otras voces dentro del Ejecutivo, entre ellas la del presidente Pedro Sánchez, ya anticiparon que este último escalón serviría a las CCAA para recuperar competencias que habían quedado congeladas desde el 14 de marzo. El Gobierno, sin embargo, no había concretado esta última concesión hasta este viernes, 72 horas antes de que más de la mitad del territorio nacional conquiste ese último escalón.
Esta misma tarde, Illa se reunirá con las CCAA "para mejorar el texto del decreto ley que se aprobará en el próximo Consejo de Ministros sobre las normas de la nueva normalidad". Previsiblemente, el encuentro será largo y la negociación compleja. Lo que se decida en esta reunión marcará el futuro de España desde ahora hasta que se descubra una vacuna contra la Covid. El ministro ha insistido en que "estamos en la etapa final, pero todavía estamos en la desescalada". Que esta se alargue más o menos en más de la mitad del país dejará de depender del Gobierno a partir del próximo lunes.
"Es una decisión que tienen que tomar los presidentes autonómicos", ha aclarado Illa. Hace dos días, el Gobierno de coalición obtuvo el apoyo del Congreso para sacar adelante una nueva prórroga del estado de alarma. La votación del Pleno fue la más incierta de las seis que se han producido desde que comenzó la crisis sanitaria. El anticipo del ministro llega 48 horas después y confirma que las implicaciones de esta última prórroga serán más simbólicas que significativas. En más de la mitad del país, la pelota quedará este lunes en el tejado de los gobiernos regionales. El titular de Sanidad ha apuntado en esta dirección: "Entendemos que la movilidad entre distintas unidades se tiene que dar en los territorios que hayan alcanzado la nueva normalidad". Es decir, en aquellos que hayan conquistado la fase 3 y donde los líderes regionales así los decidan.
Hasta este momento, la batuta de Salvador Illa había marcado el ritmo de la desescalada. Todo apuntaba a que las CCAA volverían a tomar el control cuando se agotase esta última prórroga, el próximo 21 de junio. Las palabras del titular de Sanidad señalan ahora que los presidentes autonómicos recuperarán el bastón de mando dos semanas antes de lo previsto. Aunque hoy por primera vez, el ministerio ha concretado cómo se llevará a cabo esa transición a la nueva normalidad, algunas voces dentro del Ejecutivo ya habían preparado el terreno. El domingo 31 de mayo, Pedro Sánchez anunció que, a partir del momento en que se agotase ese sexto margen, el Gobierno dejaría de tener potestad para restringir la movilidad, por lo que esta y otras competencias volverían a quedar en manos de los gobiernos autonómicos. Entonces no se habló del poder de decidir sobre el cambio de fase.
Apenas 24 horas después, el lunes 1 de junio, el ministro de Transportes, José Luis Ábalos, puso el foco en el lunes 8 de junio cuando, previsiblemente, buena parte del país estaría ya en fase 3. Ábalos fijó en ese momento el día para "establecer un nivel de movilidad bien dentro de una misma comunidad o incluso entre CCAA que estén en una misma fase". El titular de Fomento matizó que esto se produciría siempre que se hubiera alcanzado la fase 3 en el territorio de origen y en el de destino. Tampoco entonces se concretó que iban a ser los presidentes autonómicos quienes decidirían en qué momento sus territorios podrían dejar atrás la desescalada. Este viernes, Illa ha despejado todas las dudas: la determinación de cruzar la barrera hacia la "nueva normalidad" le corresponderá a las autoridades regionales, siempre que sus regiones se hallen en ese último escalón.
La pescadilla que se muerde la cola. "Si el presidente de Andalucía y el presidente de Extremadura decretan el pase a la nueva normalidad, podrá haber movimiento entre ambas comunidades a partir de que ambas estén en la nueva normalidad, por tanto depende también de las decisiones que tomen ellos, pero no fase 3, sino en nueva normalidad, cuyo pase depende de los presidentes de las comunidades", ha ejemplificado Illa. A partir del próximo lunes, este nuevo marco de decisión se aplicará a toda España a excepción de Castilla y León, la Comunidad Valenciana, Madrid, Barcelona y algunas zonas sanitarias de Cataluña, Toledo Albacete, Ciudad Real y Ceuta, que quedarán en fase 2.
Poco después de anunciar que todas las CCAA habían obtenido los avances que solicitaron, el último balance de Sanidad ha apuntado a una mejora en las estadísticas respecto al jueves. España ha sumado una muerte por Covid este viernes y detectado 177 positivos en las últimas 24 horas. Las dos cifras marcan un descenso respecto al día anterior, cuando se informó de cinco defunciones y 195 nuevos positivos diagnosticads por PCR. La prudencia manda y aún no es posible descartar rebrotes.
"Esto no es un punto final. El próximo martes aprobaremos un decreto ley para la nueva normalidad hasta tener una vacuna. Esta tarde compartiré este proyecto con las comunidades", ha explicado Illa. A falta de más detalles sobre las directrices que marcarán la nueva etapa, la última concesión del Gobierno a los líderes autonómicos, aún con el estado de alarma vigente, parece disipar el control del Ejecutivo en una nueva normalidad que cada día está más cerca.
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